Aplicar los criterios de la Iglesia católica a las inversiones cuando uno compra acciones de Wall Street o el Viejo Continente empieza a ser muy rentable. En los últimos 12 meses, las 50 empresas del S&P 500 que mejor cumplen con los requisitos católicos obtuvieron una rentabilidad del 29,2%, casi 2,5 veces más que las 50 compañías no cumplidoras, las cuales rentaron un 12,3%.
Son datos de la empresa de asesoramiento financiero y consultora Altum Faithful Investing, que “no sólo buscamos el mayor retorno para nuestros clientes, sino también ser instrumento de evangelización”, como determina su página corporativa.
En los últimos seis meses la brecha ha sido incluso mayor a favor de la inversión católica en Estados Unidos: 7,5% frente a 0,1%. En un momento de alta incertidumbre y volatilidad en el mercado, marcado por la guerra en Ucrania, la inflación, las subidas de tipos, el parón en la cadena de suministros y el desplome de las grandes tecnológicas, este tipo de enfoque cobra una especial relevancia.
Si los criterios se aplicaran al EuroStoxx 60, los resultados son igual de notables en cuanto a la doctrina social de la Iglesia católica en el mundo de las finanzas. En el último año, las 50 compañías del Viejo Continente más alineadas con estos principios subieron un 13,7%, con respecto a un 9,3% las que no, esto es, 1,5 veces más. Si acortamos el plazo al último semestre, 2,7% frente a -0,4% las ‘no creyentes’.
Altum se encarga de buscar las mejores inversiones en base a tres pilares católicos: la promoción de la dignidad humana, la familia y la vida.
Catolicismo en el Ibex
La firma fundada por Borja Barragán ya había hecho un ejercicio previo enfocándolo en el Ibex 35, de donde extrajo que 25 de las compañías del principal selectivo bursátil español son “coherentes” con la doctrina social de la Iglesia católica.
Así, estas 25 cotizadas españolas cumplidoras con el doctrinario católico son más rentables que aquellas diez que no lo son. En los últimos cinco años, las empresas alineadas con la doctrina social de la Iglesia ofrecieron una rentabilidad anualizada del 10,1%, en relativo al -2,1% del resto.
Estos resultados sugieren que “un inversor dispuesto a invertir consistentemente con los principios católicos no necesita sacrificar la rentabilidad”, realza el estudio de Altum Faithful Investing, que colabora con entidades tan famosas como Azvalor Asset Management.
De hecho, “garantizar que las decisiones financieras sean consistentes con los principios morales, éticos y religiosos se puede hacer a una tasa muy similar a la inversión convencional o, como muestran los resultados del año pasado y el semestre pasado, la diferencia positiva en la realidad puede ser notablemente mayor”.
Por ejemplo, en el último lustro, las cotizadas americanas mejor colocadas en el ranking católico rentaron a razón de un 19% por año, por un 20,7% las no alineadas, apenas 1,7 puntos porcentuales menos y teniendo en cuenta que el S&P 500 es el índice bursátil más eficiente del mundo y prácticamente imbatible para los gestores. Cosa que en Europa es más fácil de lograr. Las católicas en ese periodo dieron una TAE del 21,1%, frente a un 8,6% las ‘ateas’ o ‘agnósticas’.
Noticias relacionadas
- Rob Almeida (MFS) indica el camino para invertir en compañías de calidad: "Europa tiene menos riesgo ASG"
- El miedo se apodera de las bolsas por las subidas de tipos, el menor crecimiento y la inflación desbocada
- Jesús y Juan, los curas influencers que han boicoteado a Burger King por su anuncio vegano