El Ibex 35 se ha dejado contagiar de las pérdidas en Europa y ha cerrado el viernes con un retroceso del 0,21%. Lo que supone ceder el nivel de los 11.800, cerrando así en los 11.753 puntos y rompiendo una racha de siete sesiones consecutivas al alza.

No obstante, gracias a las ganancias previas, el gran selectivo ibérico culmina la semana con una revalorización acumulada del 1,8%.

Los parqués del Viejo Continente han estado todo el día lastrados por los números rojos, que aunque no han sido abultados, tampoco en ningún momento han pasado a verde. El desplome del 6,8% de Mercedes-Benz por su profit warning ante las débiles ventas en China ha arrastrado al resto del sector automovilístico, muy presente en las bolsas de Alemania, Francia e Italia.

Con todo, el índice español es el que menos ha perdido de todos los grandes europeos. La referencia comunitaria, el EuroStoxx 50, ha sucumbido con un retroceso del 1,43%. París y Fráncfort han perdido un 1,51% y un 1,47%, respectivamente, mientras que Milán ha aguantado mejor el envite, con una caída del 0,82%.

Volviendo a suelo español, apenas seis valores han terminado en pie. Las energéticas clásicas han liderado las ganancias, caso de Naturgy (1,89%) e Iberdrola (1,31%). Les ha seguido CaixaBank (1,25%).

Por el contrario, las más damnificadas en una jornada donde el Ibex 35 ha perdido su empuje han sido Acciona Energía (-4,05%), Acciona (-3,18%) y Puig (-3,17%). Solaria también ha sufrido un duro castigo del -2,99%.

Grifols ha cedido un 2,39% tras conocerse ayer que tres fondos que suman el 7,7% de su capital social (Flat Footed, Mason Capital Management y Sachem Head Capital Manegement) exigen un puesto en su consejo de administración. 

Así las cosas, el Ibex 35 se toma un respiro en la racha alcista que inició a comienzos de agosto. En lo que va de año, acumula una ganancia del 16,35%. El traspiés de este viernes no afea el hecho de que está siendo uno de los mejores índices mundiales de 2024.