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¿Qué tipo de fondos garantizados existen?
Según el objetivo de rentabilidad que se garantiza pueden distinguirse dos tipos:
Garantizados de renta fija (GRF): en la fecha de vencimiento de la garantía no sólo aseguran la conservación del capital inicial, sino también una rentabilidad fija y predeterminada (que se indica en el folleto del fondo en términos de interés anual, TAE). Garantizados a vencimiento (GRV): sólo aseguran la inversión inicial en la fecha de vencimiento de la garantía. Además, ofrecen la posibilidad de obtener una rentabilidad vinculada al comportamiento de diversos activos financieros o índices (de acuerdo con fórmulas de cálculo más o menos complejas). El inversor debe tener en cuenta que, si la evolución de los instrumentos subyacentes no es la esperada, es posible que no obtenga rentabilidad alguna. Qué hacer cuando vence la garantía
El partícipe debe estar atento a la fecha de vencimiento de la garantía (indicada en el folleto del fondo y en la información periódica que se le remite) ya que en ese momento deberá valorar la situación y decidir qué le conviene hacer. Con carácter general, llegado el vencimiento de la garantía estos fondos establecen o inician un nuevo periodo garantizado que incluye cambios significativos en su naturaleza, características e incluso, a veces, en su denominación. En otros casos, el fondo puede dejar de ser garantizado y seguir funcionando normalmente, con otra política de inversión. Estos cambios se comunican a los partícipes a medida que se aproxima el vencimiento de la garantía.
¿De qué opciones disponen los inversores?
Los inversores disponen de las siguientes opciones:
No aceptar las nuevas condiciones: en tal caso el partícipe debe ejercer el derecho de separación, que le permite recuperar su inversión o traspasarla a otro fondo sin soportar comisiones de reembolso durante un periodo de tiempo limitado (un mes, como mínimo). Permanecer como partícipe en el fondo: esta opción no exige actuación alguna, ya que si el inversor no ordena el reembolso durante el plazo de que dispone para separarse, se sobreentiende que está conforme con las nuevas características y desea mantener su inversión en el fondo. A partir de ese momento el partícipe queda sujeto a las nuevas condiciones (entre las que se puede incluirse la aplicación de comisiones por reembolso, por ejemplo). Renovar en un nuevo fondo con objetivo de rentabilidad, que podrá ser garantizado o no garantizado. ¿Qué debemos tener siempre en cuenta? En general, los fondos garantizados no aseguran la inversión en todo momento, sino sólo en una fecha determinada: la de vencimiento de la garantía. No todos los fondos garantizados aseguran la obtención de rendimientos. Antes de invertir, compruebe si el fondo ofrece una rentabilidad fija y segura o sólo garantiza la inversión inicial. Si opta por un fondo garantizado, es conveniente que invierta durante el período de comercialización y que reembolse en el plazo previsto después del vencimiento de la garantía. El motivo es que los fondos garantizados suelen cobrar elevadas comisiones por realizar suscripciones y reembolsos durante el período de garantía, con el fin de restringir la entrada y salida de partícipes (salvo en los periodos de transición). Los reembolsos realizados en una ventana de liquidez no se benefician de la garantía, por lo que aunque estén exentos de comisión de reembolso pueden acarrear pérdidas. Consulte el DFI del fondo garantizado para conocer sus principales características: objetivos de inversión, perfil de riesgo del fondo, gastos corrientes y comisiones, fecha de vencimiento de la garantía, etc.. Esta consulta debe ser habitual, tanto antes de realizar la inversión como una vez que se tiene la condición de partícipe. Revise con atención las comunicaciones que le remita la entidad sobre el vencimiento y condiciones de renovación de la garantía.