En su boletín mensual de febrero, publicado hoy, el Bundesbank dijo que los precios en el mercado inmobiliario siguieron subiendo en 2017, aunque no con más fuerza que en años anteriores.

La sobrevaloración de los precios en las ciudades se situó entre el 15 y el 30 %.

El aumento de los precios de compra también impulsa al alza los precios de los alquileres, que están en el nivel más alto desde comienzos de los años 1990, cuando se produjo la Unificación de Alemania.

Los nuevos contratos de alquiler incrementaron en 2017 los precios una media del 7,25 % y en las grandes ciudades, incluso, un 9,25 %.

El año pasado también aumentó notablemente la oferta de viviendas en Alemania, lo que contribuyó a que el incremento de los precios se estabilizara, si bien en las ciudades los precios de compra de los pisos se sitúan muy por encima del nivel que justificarían factores económicos y demográficos a largo plazo.

El índice de precios en propiedad para uso propio en Alemania de la Asociación alemana de bancos de cédulas hipotecarias (Verband deutscher Pfandbriefbanken) subió el año pasado un 5,75 %, frente al 6 % que se había incrementado en 2016.

Otros indicadores, añade el Bundesbank, también muestran que el encarecimiento de los precios de los inmuebles se redujo algo en Alemania en 2017, aunque en las ciudades el incremento de los precios llega al 9 %, según cálculos de bulwiengesa AG citados por el Bundesbank.

Este 9 % es un porcentaje superior a la media del 7,5 % de los tres años anteriores.

En las siete ciudades alemanas más grandes los precios subieron el año pasado en 1,75 puntos porcentuales, hasta el 9,25 %.

Los tipos de interés hipotecarios se situaron el año pasado algo por encima del 1,7 %, un nivel históricamente bajo.