El entorno de bajos tipos de interés que el Banco Central Europeo (BCE) ha confirmado hasta, al menos, el año 2022 no se presenta como el mejor clima para conseguir rendimientos con inversiones conservadoras. Sin embargo, José María Luna, socio de Luna Sevilla Asesores Patrimoniales, considera que “hay activos que dan rentabilidad sin tener que asumir un riesgo que no nos corresponde”.
En este punto señala que el asesoramiento financiero “de calidad” juega un papel clave a la hora de “informar muy bien a la gente de cuál es la realidad: un mundo de crecimiento endémico y sin presiones inflacionistas en el que vamos a tardar en ver subidas de tipos”.
Con este telón de fondo, apunta hacia activos “en la parte de ‘cuasi-liquidez’ de renta fija europea de muy corto plazo”. Aquí destaca el trabajo de gestoras como Evli, Muzinich y Renta 4 con fondos de deuda corporativa de corto plazo. Por lo que se refiere a la renta fija flexible, opta por “productos todoterreno” de firmas como Sextant con su fondo Bond Picking. Para una mayor protección, apunta hacia fondos de retorno absoluto y, en especial, señala al fondo Valor Prudente de la firma independiente española Dunas.
Para aquellos con unas espaldas más anchas a la hora de invertir en riesgo, destaca la oportunidad de entrar en “productos mixtos como de renta variable que tienen una visión global pero apostando por compañías con clara visión de negocio independiente del ciclo económico”. El fondo Stable Equity de Nordea es uno de sus favoritos en este segmento.