Por Paula Mercado, directora de análisis de VDOS.
Contradiciendo los peores augurios de principios del 2019, los mercados tuvieron un comportamiento excelente, especialmente los de renta variable. Y no sólo en Estados Unidos, donde los principales índices han ido pulverizando máximos históricos, sino también en Europa, a pesar del Brexit y de todas las incertidumbres políticas y del reducido crecimiento económico. Incluso los índices renta variable de China, en el epicentro de las tensiones comerciales con Estados Unidos, conseguían una de las mayores revalorizaciones.
Al hilo de este comportamiento, la categoría VDOS de planes de pensiones Mixto Agresivo Global es la más rentable dentro del grupo de planes mixtos, invirtiendo mayoritariamente en renta variable de ámbito global. De este grupo de planes, Global Value es uno de los más rentables durante 2019, al obtener una revalorización de 20,03%.
La cartera de este plan está diseñada para lograr un crecimiento del patrimonio similar al de los mercados de renta variable en el largo plazo, pero con un riesgo más reducido en ciertos momentos. Admite una exposición significativa a renta variable y dependiendo de las valoraciones relativas también se puede diversificar en instrumentos de renta fija, monetarios u otros activos de inversión.
UN POCO DE HISTORIA...
GBS Finanzas lanzó el Global Value PP en agosto de 2015 con el objetivo de que continuase la filosofía del 'family office', enfocado en una arquitectura abierta, centrada en las mejores ideas de inversión del mercado, y con el foco puesto en un análisis cuidadoso de las inversiones.
La cartera no cuenta con sesgos sectoriales ni restricciones por tipo de compañías. Sigue un proceso de selección de fondos, índices, y de ‘stock picking’ (selección individual de compañías) abierto al universo de compañías globales cotizadas. El fondo se gestionará con una filosofía value con una orientación de muy largo plazo. La clave de la gestión del vehículo es la diversificación en sectores y mercados, que aminora el riesgo y se aprovecha del potencial de rendimiento de los distintos activos en los que invierte la cartera.
Este plan es un vehículo adecuado para inversores con un horizonte de jubilación a largo plazo que aspiren a obtener rendimientos elevados a futuro, y por ello estén dispuestos a asumir un razonable nivel de exposición al riesgo. El horizonte de inversión recomendado es de al menos siete años con el objetivo de que las inversiones acometidas puedan madurar.
ESTILO DE GESTIÓN
El plan se gestiona de forma consensuada por el comité de inversión, compuesto por 7 miembros y liderado por Santiago Hagerman, Managing Partner de la firma. GBS Finanzas fue fundado en 1991 por un grupo de profesionales con gran experiencia en bancos de inversión internacionales de primer nivel.
El proceso de selección de valores a incluir en la cartera se inicia con
1) Búsqueda de ideas de inversión en valores que consideran atractivos, sin ningún tipo de sesgo sectorial ni de estilo de inversión y sin seguir un índice de referencia.
2) Se lleva a cabo a continuación un análisis fundamental de las compañías, filtrando por su calidad en base a la solidez de sus balances y la estabilidad de sus flujos de caja, así como a sus expectativas de crecimiento orgánico de los ingresos;
3) se construye una cartera concentrada de acciones con exposición global.
4) han de ser compañías con modelos de negocio que sean fáciles de entender, sustentados por fundamentales que estén dentro del marco ‘value oriented’ del gestor. Con el universo obtenido tras pasar los filtros anteriores.
Durante años, GBS Finanzas ha desarrollado un riguroso proceso de selección para identificar varios gestores dentro de cada clase de activo. En GBS Finanzas creen que existen gestores excepcionales con procesos de inversión muy específicos. Estos son capaces de generar valor durante largos periodos de tiempo.
CÓMO DETECTAR A LOS MEJORES GESTORES
Los principales atributos de estos gestores varían dependiendo de la clase de activo en que invierten, pero generalmente cuentan con grandes conocimientos sobre lo que hacen. Son gestores que generalmente tienen su propio y riguroso proceso de inversión, que les proporciona una cierta ventaja sobre el resto.
Para identificar a estos gestores realizan un análisis tanto cuantitativo como cualitativo. El análisis cuantitativo se utiliza para analizar los retornos pasados; es muy útil para poder identificar los mejores gestores y realizar análisis estadísticos. El análisis cualitativo sirve para determinar si los retornos que ha obtenido pueden seguir generándose en un futuro, y tener un profundo conocimiento de cómo piensa y razona el gestor.
Una de las metodologías de inversión que más les gustan es el ‘Value Investing’. Hay una filosofía completa detrás de este concepto, pero su enfoque principal se basa en la búsqueda de valores que están infravalorados respecto con su valor intrínseco.
POSICIONES
Las cinco mayores posiciones en la cartera del fondo corresponden al fondo cotizado ETF Ishares Physical Gold (4,27%) y las acciones de compañías como Ivanhoe Mines (3,36%) Mowi ASA (2,81%) y Svenska Cellulosa (2,61%), así como el fondo Franklin Templeton K2 Wellington Technology L/S (2,68%). Por sector (se excluye liquidez, que ahora está en el 25 por ciento) Consumo no cíclico (15,77%) Comunicaciones (7,88%) Materiales básicos (6,80%) Energía (6,77%) y un ETF de Oro y Plata (8,39%) representan las mayores ponderaciones.
Por rentabilidad, el plan se sitúa entre los mejores de su categoría, en el primer quintil, durante 2017, batiendo al índice de su categoría en 2018 y 2019. A tres años, registra un dato de volatilidad de 12,59 por ciento y de 10,46 por ciento en el último año, periodo en que registra una ratio Sharpe de 2,01 y su tracking error, respecto al índice de su categoría, es de 4,76 por ciento. La suscripción de GLOBAL VALUE requiere una aportación mínima, inicial y periódica, de 0,01 euro, aplicando a sus partícipes una comisión fija de 0,95por ciento y de depósito de 0,10 por ciento.
Para los próximos 5 años, el equipo gestor espera que la renta variable sea el tipo de activo más rentable, sobre todo en términos relativos frente a los bonos soberanos, que darán una rentabilidad negativa. La principal variable que estarán monitorizando en términos de riesgo, es un potencial repunte en los tipos de interés. Aunque por el momento los bancos centrales han garantizado que no subirán, los tipos bajos son el principal factor que actualmente da soporte a la valoración de los distintos activos.
Para 2020 estiman un crecimiento económico global de entre 3 y 3,5 por ciento, similar a la media de los últimos 5 años. El ciclo económico está en una fase avanzada y esperan que se mantengan las políticas acomodativas de los bancos centrales. El acuerdo parcial alcanzado entre Estados Unidos y China y un Brexit ordenado han disipado el riesgo de recesión. Sin embargo, la reaceleración de la actividad económica global no será evidente hasta la próxima primavera. Los mercados financieros probablemente descuenten anticipadamente esta recuperación, por lo que el principio de año debería de ser positivo.
Eventualmente, podríamos ver momentos de cierta volatilidad, dado que los bonos cotizan a valoraciones extremas, y la deuda soberana europea dará rentabilidades negativas. La renta fija soberana americana esta cara, pero sigue siendo de los pocos activos descorrelacionadores en caso de recesión
Las valoraciones entre las compañías 'value' y las de crecimiento han llegado a un extremo, por lo que podríamos estar en un punto de inflexión. Durante los últimos años, los inversores han apostado por las acciones de tecnología con mejor crecimiento (FAANG: Facebook, Amazon, Apple, Netflix, Alphabet) dejando de lado las empresas consideradas ‘value’ o más cíclicas.
La evolución del plan en los últimos tres años, tanto por rentabilidad como por volatilidad, hacen al Global Value merecedor de la calificación cinco estrellas de VDOS.