Los inversores se preguntan si la economía mundial se verá frenada por los altos precios del petróleo derivados de la guerra en Ucrania. El crudo lleva instalado por encima de los 100 dólares el barril desde el inicio de la invasión rusa, tras un rally vertiginoso que se inició en marzo de 2020, con el estallido de la Covid. Con todo, los expertos de Allianz Global Investors creen que la recuperación económica no va a descarrilar por los ajustados precios del oro negro.
“La incidencia del petróleo sobre la economía es muy distinta ahora a la de los años 70. Su incidencia sobre la producción económica ha pasado del 70% al 40%. El Yom Kipur queda ya muy lejos y no hay riesgo de que descarrile la recuperación económica”, ha aseverado Jesús Ruiz de las Peñas, director de Desarrollo de Negocio de Allianz Global Investors, en un encuentro temático sobre inversión en materias primas.
Pese a ello, Ruiz de las Peñas sí reconoce que, durante las últimas semanas, “donde más hemos visto componente especulativo es en el precio del petróleo”. “Quizá financieramente uno pueda preguntarse si llega tarde a la inversión en crudo. Aunque siempre hay un decalaje de tiempo entre el comportamiento de la compañía petrolera con respecto a la materia prima en sí misma”, ha matizado.
La gestora alemana sigue pensando que invertir en materias primas, energía o metales es una buena opción para los inversores que busquen “descorrelacionar y diversificar” su cartera con respecto a los activos tradicionales, aunque hay que hacerlo “de forma activa y con miras amplias”. Sus buques insignia en este terreno son los fondos Allianz Dynamic Commodities y Allianz Global Metals and Mining.
Porque, más allá del conflicto bélico en la frontera este de Europa y sus repercusiones evidentes sobre los precios al alza de estos activos, la senda hacia una economía global más verde es un camino que no tiene vuelta atrás. Y eso abre una ventana de oportunidades de inversión.
Metales de transición y frente a la Fed
“La inversión en metales es donde existe más valor. El fenómeno de la transición energética no es coyuntural, es estructural a largo plazo”, confía el ejecutivo de Allianz GI. “La demanda de litio, cobre o aluminio se multiplicará por siete en los próximos años a causa de la transición energética”, pero “también por la urbanización o la demanda de nuevas tecnologías”.
Aunque, por el transcurso habrá un peaje: “En los dos o tres próximos años veremos un mayor nivel de emisiones contaminantes para poder adaptarnos a la transición energética y que sea justa para todos”, en referencia a la necesidad temporal que tienen algunos países de echar mano del carbón, el gas o la energía nuclear.
A este contexto se suman las subidas de tipos por parte de la Reserva Federal o el Banco de Inglaterra, que no hacen otra cosa sino acrecentar el brillo de las materias primas como activo a invertir. Un análisis de Allianz GI demuestra que en los ciclos en los que la Fed ha subido el precio del dinero, las commodities son las que mejor retorno medio han ofrecido: un 20,5%, frente a un 13,7% de las acciones globales o un 1,45% los bonos gubernamentales.