Ofensiva de las aseguradoras para gestionar las carteras de fondos de los clientes que la banca descuida
Mutua Madrileña, Santalucía o Mapfre potencian un servicio de cobro explícito que la normativa europea favorece.
Las aseguradoras sacan toda su artillería para captar a los clientes 'huérfanos' de la banca. Un segmento que casi todos los ejecutivos de las compañías de seguros coinciden en establecer entre los 500.000 euros y los 2 millones de euros. Una tipología de clientes que suele tener carteras discrecionales de fondos, un servicio por el que ahora se pelean grandes marcas como Mutua Madrileña, Santalucía o Mapfre.
En poco más de dos meses, los brazos de inversión de estas tres aseguradoras han presentado sus respectivos planes estratégicos para los próximos años y la gestión discrecional de fondos de inversión -ya sea más indexada o más personalizada- se repite como una de las principales prioridades para el sector del seguro.
El primero en mover ficha fue Mapfre Gestión Patrimonial. Entre los nuevos productos y servicios que lanzará para aportar un mayor valor añadido a sus altos patrimonios, está la gestión discrecional de carteras. También el asesoramiento ad hoc o los vehículos alternativos de activos privados o no cotizados, como prácticamente todo el sector.
En lo que respecta a la gestión discrecional de carteras, Mapfre GP no facilita su dato de negocio a Inverco, la patronal de las gestoras. A pesar de su cierta antigüedad, ya que data de 2017, este servicio cuenta con un volumen todavía residual con respecto al conjunto de sus activos bajo gestión. Con todo, Daniel Sancho, director de Inversiones de Mapfre GP, considera que es uno de los servicios básicos que las entidades financieras sí o sí van a tener que robustecer.
"La normativa europea, sobre todo la nueva Estrategia de Inversión Minorista (RIS, por sus siglas en inglés) que se está ultimando en la UE, lleva hacia el cobro explícito de los servicios de inversión. Y la gestión discrecional de carteras de fondos está en el centro de ese cobro explícito", según Sancho.
Esto cobra especial sentido en las aseguradoras, muy alejadas de los importes de la banca. La gestión discrecional de carteras mueve en España unos 118.000 millones de euros, con datos de Inverco a cierre de 2023. Pero hay distintas velocidades.
La gran banca es quien más dinero mueve en este servicio: CaixaBank, cerca de 45.450 millones; BBVA, 18.700 millones; Santander, casi 17.450 millones; y Kutxabank, en el entorno de los 10.900 millones. Pero los grandes grupos bancarios están virando su estrategia comercial hacia las grandes fortunas, lo que deja un resquicio para las aseguradoras.
Los bancos comerciales o cajas rurales que menos dinero mueven en carteras discrecionales de fondos son Abanca o Grupo Caja Rural, con algo más de 1.200 y 1.100 millones, respectivamente.
Estas cifras contrastan con las de las aseguradoras, más rezagadas por el momento, pero con ganas de cerrar esta brecha. Mutuactivos tiene casi 470 millones y Santalucía apenas llega a los 35 millones. Catalana Occidente, por su parte, reporta cero euros a la patronal.
Relanzar el servicio
En el caso del Grupo Mutua, si bien posee el 84% de EDM, quien maneja más de 1.460 millones en carteras discrecionales, éstas todavía no están bajo su paraguas a nivel operativo. Caser, por ejemplo, no oferta el servicio como tal, aunque dispone de diferentes formatos (seguros unit linked o planes de pensiones) que contienen cestas de fondos indexados de Finizens o Indexa Capital. Esta última, por sí sola, administra 1.960 millones de euros en carteras de gestión discrecional, pero no todo de Caser.
El director general de Santalucía Asset Management, Gonzalo Meseguer, ha avanzado esta semana que la entidad relanzará a gran escala su servicio de gestión discrecional de carteras, heredado de la antigua Alpha Plus, antes de que termine 2024. Lo hará a partir de 50.000 euros, con cinco perfiles de riesgo distintos y con entre un 50% y un 70% de fondos con el cuño de la casa.
La última en plantar batalla ha sido Mutuactivos. Su presidente ejecutivo y consejero delegado, Luis Ussía, ha explicado que habrá dos tipos de carteras. Para los clientes de 100.000 a 500.000 euros, la firma lanzará carteras gestionadas con una asignación de activos más pegada a los índices. Mientras que para los clientes de más de 500.000 euros estrenará carteras personalizadas con una mayor discrecionalidad en la asignación de activos con respecto al índice.