El fondo de biometano de Mapfre e IAM llega a su tope de 13 plantas: las primeras estarán operativas en 2026
- Se encuentran en pueblos como Olmedo, San Esteban de Gormaz, Villa del Prado o Monterrubio de la Serena.
- Más información: Redexis cierra su primera venta de biometano con Pavilion Energy, propiedad del fondo soberano de Singapur.
El fondo de biometano de Mapfre, Abante e IAM Carbonzero llega a su máximo de capacidad. El vehículo -con un tamaño objetivo de 100 millones de euros y que recabó el compromiso de 15 millones por parte del ICO a través de AXIS, entre otros inversores- ha alcanzado las 13 plantas de biometano en proceso de autorización y desarrollo.
Mapfre Energías Renovables II ya cuenta con seis plantas en Extremadura, cinco en Castilla y León, una en Madrid y otra en Cataluña. En pueblos como Olmedo (Valladolid), San Esteban de Gormaz (Soria), Villa del Prado (Madrid) o Monterrubio de la Serena (Badajoz).
Partiendo de los 100 millones de equity levantados, la inversión total ascenderá a 250 millones de euros en estas plantas. Según ha podido saber EL ESPAÑOL-Invertia, las primeras plantas que empezarán a construirse lo harán a comienzos de 2025, por lo que estiman estén operativas a inicios de 2026.
Según José Marcos González y Máximo Mayordomo, responsables de IAM Carbonzero, el proceso completo de montar una planta de biometano en España desde cero hasta que entra en funcionamiento suele rondar los dos años y medio.
El biometano es un biocombustible 100% verde que se obtiene a partir de residuos orgánicos como deshechos de las urbes, estiércol de vaca, purines de cerdo, residuos de las cosechas, lodos de depuradora o residuos agrícolas.
El biometano posee una composición química comparable a la del gas natural, lo que permite su inyección en la red de gasoductos, generar energía eléctrica a través de motores y su uso como combustible en vehículos sostenibles. Más allá de eso, “y no menos importante, también sirve para quitar olores”, tanto en el campo como en los entornos urbanos, recuerdan González y Mayordomo.
Incluso, industrias como la farmacéutica o la alimentaria están analizando técnica y legalmente con la UE qué usos futuros se le puede dar al dióxido de carbono (CO2) negativo o neutro que se obtiene a partir de este proceso.
La industria del biometano
Diferentes estudios sitúan a España como uno de los países de la Unión Europea con mayor potencial en biometano por su disponibilidad de recursos. Sin embargo, el retraso en el despliegue de esta tecnología nos colocan a la cola de Europa.
El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) establece un objetivo de producción de 20 TWh/año de biogás para 2030, el equivalente a menos del 2% de la demanda actual de gas. Sin embargo, este objetivo ha sido tachado de poco ambicioso por el sector.
Según los cálculos de la patronal gasista, Sedigas, España tiene una capacidad de producción de hasta 163 TWh/año, lo que permitiría cubrir aproximadamente el 50% de la demanda de gas natural.