Alsa reconoce que el 70% de sus ingresos han caído por la paralización del transporte tras el decreto del estado de alarma. Una situación que ha obligado a la empresa ha solicitar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para la mitad de su plantilla.
Lo ha comunicado National Express, que es su matriz, quien explica que los servicios se han reducido por debajo del 50% sin que, por ahora, el transporte urbano se haya visto afectado.
En ese documento explica que la mitad de sus trabajadores se verán afectados por un ERTE en el que cobrarán el 75% de sus ingresos. E insiste en que el Gobierno se ha comprometido a que las empresas puedan reclamar los costes de los trabajadores que no puedan acogerse a estas estructuras de flexibilidad.
Los costes totales
Alsa supone un 30% de los ingresos del grupo. Actualmente los contratos de personal de la compañía alcanzan los 200 millones de euros, que suponen el 20% de los costes totales de la empresa de autobuses.
Además reconoce National Express que Alsa está renegociando sus contratos con las autoridades españolas para conseguir que haya "tarifa por kilómetro".
Con esta decisión, Alsa se convierte en otra de las empresas que decide enviar a sus trabajadores a un ERTE tras la declaración de estado de alarma para combatir el coronavirus.