Talgo engorda su cartera de pedidos mientras Sidenor se hace de rogar con su oferta

El pasado 21 de octubre, Talgo anunció que se sentaba a negociar con Sidenor tras recibir cinco días antes una carta de manifestación de interés por parte del grupo industrial. De eso ya ha pasado un mes. Durante este tiempo, no ha habido grandes novedades más allá del respaldo del Gobierno vasco y del nacional a las intenciones de la empresa vasca, aunque aún no se ha concretado si ese respaldo supone su entrada en el capital del fabricante.

En caso de acompañar a Sidenor en su oferta, el Gobierno vasco podría hacerlo a través del fondo Finkatuz, un instrumento financiero gestionado por el Instituto Vasco de Finanzas (IVF), mientras que el Ejecutivo de Pedro Sánchez podría hacerlo con la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). 

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Pero de momento, ambas compañías guardan silencio y el Gobierno, por su parte, deja caer la posibilidad de entrar en el fabricante de trenes. "Nosotros estamos para acompañar a Talgo en ese camino, en el que lo que está buscando es más capacidad industrial y una nueva composición accionarial que le dé también estabilidad de futuro", dijo recientemente el ministro de Transportes, Óscar Puente. 

Mientras Talgo sigue necesitando un socio industrial para dar salida a su elevada cartera de pedidos. La cifra de los 4.000 millones suma los nuevos pedidos registrados en el tercer trimestre por valor de 228 millones. Éstos comprenden principalmente proyectos de mantenimiento.

Apartado importante ya que en los últimos años la actividad de mantenimiento genera entre un 30% y un 50% de los ingresos del fabricante español, según datos aportados por la compañía a este periódico.

A esto hay que añadir los 280 millones del contrato de trenes a Egipto que se ejecutará en octubre de 2024. En total, son 508 millones de euros. 

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Cabe recordar que con fecha 9 de agosto de 2022, ENR (Egyptian National Railways) adjudicó a Talgo un contrato para el suministro de siete trenes nocturnos. Además, el proyecto contemplaba el mantenimiento de los trenes durante un periodo de 15 años. 

De acuerdo con el calendario establecido hace dos años, el proyecto contemplaba que las unidades se comenzarían a entregar a partir de 2024. Y, en principio, parece que todo va en orden. 

Histórico de retrasos

Todo lo contrario de lo que ha ocurrido con otros pedidos. El caso más polémico fue el de los trenes Avril de Renfe. Un pedido de 30 convoys de la serie 106 que suma un retraso de dos años. De momento, el operador ya ha recibido 23 trenes de este modelo y, por lo tanto, le falta recibir siete más, tal y como ha ido avanzando este periódico.

Por esta demora Renfe castigó a Talgo con una multa diaria de 80.000 euros, que se suma a la penalización de 116 millones de euros por retrasos y 50 millones de euros adicionales por lucro cesante.

De hecho, en septiembre Renfe y Talgo agotaron la fase de conciliación respecto a las compensaciones que la empresa pública le había pedido al fabricante por este retraso.

Caso parecido es el que podría ocurrir con el mayor pedido de la historia del fabricante: los 79 trenes para la alemana Deutsche Bahn valorados en unos 2.000 millones. Los primeros trenes se deberían haber entregado en 2023, pero es verdad que el pedido se amplió de 23 convoys iniciales a 79 ese mismo año. 

Aún así el Gobierno de Alemania ya ha comenzado a apretar al fabricante para que cumpla con los plazos, según avanzó este periódico. Motivo por el cual la entrada de la SEPI en la oferta de Sidenor cobra especial importancia para hacer de escudo frente a posibles sanciones de los alemanes por los retrasos. 

Talgo S106 Avril, el modelo que está dando problemas a Renfe Alberto Ortega Europa Press

También está en el punto de mira otro importante contrato que en 2023 duplicó el número de convoys por un valor de 184 millones de euros. Hablamos de la operadora ferroviaria estatal danesa, DSB (Danske Statsbaner), que encargó 16 trenes intercity Talgo 230 y piezas de parque para su mantenimiento. 

Talgo ya explicó a mediados de año que el 80% de sus pedidos proceden de proyectos internacionales. De hecho, el fabricante anunció que continúa analizando oportunidades para los próximos 24 meses por valor superior a los 6.000 millones.

En este sentido, el 64% de los proyectos potenciales se identificaron en el mercado europeo, y un 31% adicional en países de Oriente Medio y norte de África. Así que quizás, cuando acceda a esas oportunidades, ya tenga el apoyo del esperado socio industrial.