Ni la lluvia minutos antes de empezar la cabalgata ni el frío han ahuyentado a las miles de personas que estaban esperando para recibir con una cariñosa acogida a los Reyes Magos de Oriente en la cabalgata de Madrid 2024.
Los niños han recibido con gran ilusión a Sus Majestades de Oriente, que junto a sus padres ya llenaban con impaciencia el Metro y autobuses con escaleras, paraguas y bolsas de plástico.
"¡Melchor, Gaspar, Baltasar! Os doy a todos un 10", decía uno de los tantos niños que han disfrutado como nadie esta cabalgata, mientras intentaba conseguir el mayor número de caramelos posible.
"¡Caramelos, por favor!", no paraban de chillar con las bolsas abiertas entre sus brazos. También han aparecido paraguas abiertos o niños sobre escaleras para recoger todavía más.
El Ayuntamiento de Madrid estima que han asistido más de 300.000 personas, que han podido disfrutar el mágico espectáculo que han dado Melchor, Gaspar y Baltasar.
Un año más, el rey que mayor furor ha causado ha sido Gaspar, que contaba hasta con un club de fans en entre el público. "Somos del team Gaspar", se podía leer en una pancarta.
Pero los asistentes se han llevado más sorpresas curiosas este año como ha sido la aparición de cien personas con el famoso jersey navideño del Metro, jirafas rojas gigantes o luchadores de espadas láser.
El gran secreto hasta el último momento han sido las tres carrozas reales. Escoltada por diez caballos fantásticos y plenos de luz han acompañado la carroza de Melchor, teñida de oro.
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Junto a esta y las otras dos carrozas, ha caminado una comitiva de alrededor de ciento ochenta pajes, que asiste a cada uno de los magos y que tienen una de las misiones más importantes de la caravana: dar caramelos, el anticipo de sus regalos, a los miles de niños que asisten al evento.
El séquito de Gaspar ha venido con un maravilloso camello articulado y, desde el continente africano, como el tercero de los magos, han llegado siete impresionantes jirafas rojas, mientras sobre un elefante aparecía el Rey Baltasar.
Por otro lado, no han faltado a la cita "instituciones" como Antonio Rubio, bombero que lleva desfilando en la cabalgata más de 50 años, junto al resto del Cuerpo de Bomberos de Madrid o el Escuadrón de Caballería de la Policía Municipal, que han dejado que los niños acariciaran a los caballos sobre los que iban montados.
Al terminal el recorrido, el alcalde José Luis Martínez-Almeida ha recibido "con los brazos abiertos" a los Reyes Magos y les ha informado de que "los niños de Madrid se han portado muy bien y todos se merecen un regalo".
En su discurso en Cibeles, Sus Majestades han dado las gracias a la gente por haberles recibido en Madrid tan cariñosamente, "como siempre".
Melchor se ha dirigido especialmente a los niños, ya que sabía que llevaban mucho tiempo pensando esta noche y para muchos es la más especial del año. "Hemos leído despacio todas vuestras cartas, y haremos lo posible porque recibáis lo que habéis pedido", ha dicho el Rey Mago para calmar a los más pequeños que esperan con ansia abrir sus regalos.
No se han olvidado de los padres y madres de estos niños, "que viven con emoción la emoción de los hijos", y que se pasarán el día de mañana leyendo instrucciones y montando juguetes. "Sois nuestros cómplices en esta noche inolvidable", han gritado ante los miles de asistentes a la cabalgata.
Al son de Vivaldi y con un maravilloso espectáculo de fuegos artificiales, los Reyes Magos abandonan el escenario de Cibeles para emprender su viaje por los hogares de Madrid y de resto del mundo.