Así será el nuevo museo que abrirá junto a Madrid Río: autobuses de los años 40, tranvías y planos históricos
- La colección de vehículos históricos de la Empresa Municipal de Transporte (EMT) se trasladará a una parcela de 4.460 metros cuadrados.
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Los aficionados a la historia de Madrid en general y de su transporte urbano en particular tendrán en Madrid Río un nuevo 'templo' que visitar. El futuro Museo de la Empresa Municipal de Transportes se levantará en una de las parcelas de la zona. Ahí, en un espacio de 4.460 cuadrados, los más nostálgicos podrán disfrutar de autobuses legendarios como los de dos pisos Guy Arab (1947) y Leyland Titan (1957), así como de otros elementos clásicos de la EMT, como marquesinas antiguas, maquetas, asientos de tranvías y buses, planos y mapas de distintas épocas.
Desde el año 2016, el Museo de la EMT se encuentra en las instalaciones del Centro de Operaciones de la compañía municipal en Fuencarral, en una antigua nave. Ahí están, desde entonces, los más de 40 vehículos históricos de la colección. El año pasado, un total de 6.200 visitantes visitaron el espacio. Con el desarrollo de Madrid Nuevo Norte, el Museo EMT Madrid tendrá que trasladar su sede, en un futuro próximo, para seguir recibiendo las visitas del público.
EMT trabaja desde 1990 para conservar una unidad de cada modelo que se ha ido retirando de las calles. Los vehículos 'jubilados' llegan en diferentes estados de conservación. Por ello, la compañía también se dedica a restaurarlos y ha llevado a cabo tareas de investigación.
El nuevo Museo se levantará, en concreto, entre las calles Duque de Tovar, San Epifanio y el paseo de los Melancólicos. El Ayuntamiento de José Luis Martínez-Almeida firmó la semana pasada un convenio con el Colegio de Arquitectos de Madrid (COAM) para que el órgano colegiado asesore y apoye técnicamente el concurso que se organizará para la edificación del nuevo edificio.
La COAM y el Ayuntamiento buscan que al concurso se presente un amplio abanico de propuestas arquitectónicas de "calidad". Finalmente, serán seleccionados por un jurado formado por profesionales de "probada competencia y reconocido prestigio", designados conjuntamente por el Colegio y Cibeles, según ha informado esta semana el Consistorio en un comunicado.
A la licitación podrán presentarse todos los arquitectos habilitados para ejercer en España. El concurso contará con una única fase de anteproyectos.
El importe de los premios será de 50.000 euros para el primero, 10.000 euros para el segundo, 5.000 euros para el tercero y tres accésits con una dotación de 2.500 euros cada uno.
El dinero del primer premio será considerado como adelanto de los correspondientes honorarios del contrato de anteproyecto, proyecto básico, proyecto de ejecución y dirección facultativa de quien resulte adjudicatario del concurso.
Por su parte, el Colegio de Arquitectos de Madrid desempeñará sus tareas de asesoría y colaboración en la preparación de la documentación técnica, además de la difusión y publicidad de este concurso público a nivel profesional, así como la posterior gestión de su desarrollo. El convenio suscrito también prevé el montaje de una exposición en la sede del Colegio de Arquitectos que recogerá los resultados del concurso.
Polémica por la ubicación
El anuncio del futuro Museo no ha gustado a todos. Vecinos de Arganzuela han protestado porque querían que en la misma parcela se ubicase una nueva instalación deportiva.
La Asociación Vecinal Pasillo Verde-Imperial y las AMPAs IES Gran Capitán y CEIP Tomás Bretón consideran que el Gobierno de Almeida "no respeta la memoria vinculante del APE 02.27 Nuevo Mahou Calderón tras anunciar la creación del museo" porque esa parcela "está destinada a mejorar las dotaciones deportivas para el alumnado y profesorado del IES Gran Capitán y del barrio ante la saturación del polideportivo Marqués de Samaranch y la llegada de nuevos vecinos de las 1.300 viviendas".
El alcalde de Madrid, por su parte, respondió a las críticas el mismo viernes. Almeida aseguró que los vecinos tendrán una parcela deportiva de "15.000 metros cuadrados" y más próxima a las viviendas.
"En nuestra opinión, genera mejores condiciones para la infraestructura deportiva que la otra parcela que, por otra parte, yo creo que también es un equipamiento bueno para la zona y para toda la ciudad", agregó el primer edil.