Escándalos, gusanos en la comida y unas obras que no llegan… el caos del mejor hospital de Madrid

El Hospital Universitario La Paz es famoso a nivel internacional pues, en muchos ránkings, aparece como el mejor hospital de España. Es una insignia de la sanidad madrileña aunque, dentro de nuestras fronteras, siempre está rodeado de polémica.

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De hecho, La Paz encadena unos meses "negros" entre inundaciones, denuncias entre profesionales sanitarios y, ahora, servicios de comida en mal estado. Todo un cúmulo de circunstancias regadas, además, por la paralización de su esperada reforma.

Hay que recordar que la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, fue la primera que anunció la reforma de este macrocomplejo hospitalario. La Paz tiene todo tipo de servicios, pero sus instalaciones son de otra época. Por eso, Isabel Díaz Ayuso ha presentado una ambiciosa reforma que no se termina de llevar a cabo.

Los médicos hablan de una parcela en Castellana como la causante de todos los problemas. La única razón por la que Ayuso todavía no ha dado luz verde a empezar con las reformas. Desde la dirección del Hospital y la propia Puerta del Sol piden "paciencia" y recuerdan que se están llevando a cabo grandes reformas en otros macrohospitales como el 12 de Octubre.

Pero mientras que los profesionales esperan a las ansiadas reformas del mejor hospital de España, los escándalos se suceden. El último lo ha adelantado esta semana El Periódico de España. Una profesional aseguraba haber encontrado un gusano en su comida y denunciaba el mal estado del servicio de restauración del centro sanitario. 

El gusano en la croqueta

Madrid Total se ha puesto en contacto con la Consejería de Sanidad de Fátima Matute quiénes han verificado que el pasado 7 de octubre se recibió una reclamación por el estado de la cena.

"La doctora se queja de haber encontrado un gusano en una croqueta, pero no se la enseña al personal de cocina por lo que no se pudo verificar que se tratase de un gusano", explican estas fuentes.

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De esta forma, Sanidad recuerda que, en caso de encontrar algún elemento extraño en la comida, es "imprescindible" mostrar la evidencia del mismo para que el Servicio de Hostelería pueda efectuar las indagaciones oportunas y las reclamaciones necesarias a los proveedores.

"En lugar de eso -continúa la explicación del equipo de Matute-, la médica tiró su plato de croquetas a la fuente del autoservicio inutilizando toda la comida que por seguridad alimentaria ya no pudo ser empleada para dar de comer al resto de profesionales".

Más allá del hecho anecdótico, Sanidad insiste en que esa croqueta no era de elaboración propia, sino congelada y que se ha comprobado si en el lote había más en mal estado sin observarse "nada inusual". "

No había presencia de elementos ajenos o extraños a su composición. Su aspecto, sabor y textura eran las habituales, así como las condiciones de conservación que eran las adecuadas", apuntan.

Bajas por estrés

Precisamente, ese mismo día en el que la facultativa encontró el gusano, los medios de comunicación se hacían eco de la situación de "caos" de la UCI Pediátrica. Siete de los 15 médicos que la conforman habían tenido que coger la baja laboral por la reincorporación de un antiguo jefe que fue cesado por "comportamientos inadecuados".

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Los profesionales no habían podido aguantar de nuevo esta situación de acoso y se daban de baja laboral por motivos de salud. No se ha podido conocer ningún testimonio de los profesionales, pero, al parecer, había faltas de respeto "constantes" hacia la plantilla.

Fuentes del Gobierno de la Comunidad de Madrid afirmaron ser conocedores del suceso, pero recordaron que era una "sentencia judicial" la que había obligado a la readmisión del jefe de la unidad.

Actualmente, hay un recurso planteado por la parte contraria y lo "prudente" por la propia protección de datos y la casuística del problema es "mantenerse al margen hasta que haya una sentencia firme".

Inundaciones 

Además, La Paz ha protagonizado varios titulares durante este último año por las consecuencias de las lluvias en su infraestructura o, incluso, por la rotura de tuberías. 

Eso fue precisamente lo que ocurrió el pasado septiembre en el servicio de Urgencias. En este caso, la 'culpa' no era del Hospital, sino de las obras de ampliación de la parada de Metro de Begoña. Mientras que los operarios trabajaban, se rompió una tubería de agua del Canal de Isabel II. 

El incidente obligó a derivar a otras áreas del hospital los servicios de Urgencias y al trasladado de los pacientes que allí se encontraban, "unos 200", según CCOO.

Aunque no era la primera vez que La Paz parecía una piscina. Una gran tormenta el 30 de mayo también inundó parte de sus salas. "Es muy habitual que se rompan los techos, revienten las bajantes y entre agua porque no hay mantenimiento", denunciaban desde el propio hospital cuando se conocía lo sucedido. 

Según estos mismos sanitarios, la ansiada reforma que esperan en La Paz podría solventar estos problemas y, además, dar una mayor flexibilidad al centro para que, cuando haya picos de casos de gripe o covid, no se sature. 

Es por eso por lo que desde varios servicios de este hospital de referencia están pendientes del Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid. Según confirman a Madrid Total debe ser allí donde se publique el cambio urbanístico de la parcela de la Castellana que está bloqueando la reforma.

Concretamente, sólo hace falta aprobar el proyecto para tramitación urbanística (pendiente de autorizar por el Consejo de Gobierno desde hace un año) de dicha parcela de Castellana y la consecuente luz verde a la licitación de las obras del edificio industrial.

Además, se deben licitar las obras del Hospital Enfermera Isabel Zendal para poder acondicionarlo de manera previa al traslado de actividad mientras se lleven a cabo las primeras actuaciones en la parcela de Castellana (que forma parte de la conocida como fase 0).