La pastelera de Mayson Kayser se pasa a la pasta fresca: el nuevo 'Mc Donald's' de platos caseros en Chamberí

María Fraile es una madrileña más que conocida en la restauración capitalina y la perfecta descripción de lo que es una mente inquieta. Después triunfar trayendo la pastelería Maison Kayser a Madrid, en la que viralizó los New York rolls y la crookie, hace menos de un mes que ha abierto un concepto "totalmente diferente" en el que ya se están formando largas colas de gente.

Passsta (Zurbarano, 13) es el nuevo local de autoservicio en el que "en menos de 6 minutos" ves cómo te preparan tu plato de pasta fresca. La razón de este negocio es que María se ha criado en la cultura de la pasta desde bien pequeña.

"Para mí era lo más ir a la casa de mi abuela paterna a comer macarrones", explica María Fraile. Los recuerdos de su infancia le hicieron reparar en que "no había en Madrid ningún sitio de pasta buena, casera y que lo prepararan rápido", cuenta la hostelera que trajo la famosa pastelería Maison Kayser a España.

Platos de Passsta. Passsta

"Aprendí con la panadería que el éxito es tener un producto de calidad, que lo hagas realmente tú y que esté a vista del cliente, para que sepa que no es un discurso, que es verdad", explica María en conversación telefónica con Madrid Total desde México, donde se encuentra celebrando el 10 aniversario de Maison Kayser, concepto que también llevó la madrileña al país americano donde abrió hasta 60 puntos de venta.

Por eso, al entrar a Passsta (su nombre emula a un espagueti), hay un mini obrador con una máquina de pasta en la que sus seis empleados se pasan todo el día trabajando, algo de lo que te puedes cerciorar a través del cristal.

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Aseguran no ser un restaurante, sino un "bar de pastas", pero lo cierto es que cumple con la estructura de un Mc Donald's o Burguer King, pero de comida casera, al contar con pantallas para pedir de manera rápida e intuitiva. De esta manera, han creado un modelo de autoservicio en el que puedes tanto pedir para llevar el bowl como para comer en el pequeño local.

La carta es "muy simple, reducida y fácil". Ofrece seis tipos de salsa diferentes (carbonara, pomodoro, boloñesa, pesto, trufa, chorizo y de quesos) y varias formas de pasta: fusili, casarecci (una pasta corta, pero alargada), cornetti, macarrones y linguine (pasta alargada); además de macarrones integrales y sin gluten. También, bajo petición de los clientes, la próxima semana incluyen, el saludable konjac.

Panatallas de Passsta. Passsta

"El cliente puede elegir el 100% del plato (la pasta, la salsa y los toppings) y también hay opciones preparadas si no quieren pensar", apunta Faile. Los precios que parten desde los 9,90 euros, el menú, que incluye el plato de pasta y un refresco o agua.

"Me apetecía hacer algo diferente sin dejar nuestros inicios y que sea 100% nuestro", explica María. De esta manera, abre su propio negocio por su cuenta, sin la firma de Maison Kayser, que ella representa en España.

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De momento, Chamberí le ha "acogido con los brazos abiertos" desde el 23 de septiembre. Ubicado en una zona que recoge muchas oficinas y vecinos del barrio, el cliente ha confirmado la necesidad de comer rápido, rico y lo más saludable posible.

María Fraile cuenta que tanto ella como su familia no pueden estar más "orgullosos" de homenajear los macarrones de su abuela con el nuevo Passsta, concepto que le gustaría expandir por Madrid, al igual que está haciendo con los ocho Maison Kayser con los que ya cuenta.

Los inicios de María Fraile

Los inicios profesionales de María Fraile se remontan a cuando conoció al que sería su futuro marido en Suiza mientras estudiaba dirección hotelera.

Una vez juntos, decidieron mudarse a París, donde empezó su marido Alexandre de camarero en la conocida pastelería francesa Maison Kayser. Enseguida encajó con el propietario, el señor Kayser, por lo que siguió escalando profesionalmente hasta llegar a convertirse en el director de operaciones de todo el grupo hostelero.

Años más tarde, el matrimonio decidió mudarse a México, donde llevaron esta pastelería y acabaron abriendo 60 puntos de venta. En 2020 vinieron a vivir a Madrid, la ciudad de María, para traer Maison Kayser a España, donde cuentan con siete obradores en la capital. Además, están preparando dos nuevas aperturas próximamente.