Negro sobre blanco, los compromisos del Gobierno central con la provincia de Málaga para 2022 ya están en papel. Con la entrega en el Congreso de los Diputados de los Presupuestos Generales del Estado para el próximo ejercicio, acto que ha tenido lugar este miércoles, se pone en marcha el procedimiento que debe permitir aprobar en los próximos meses las cuentas estatales.
En una primera lectura de las cifras contenidas, el capítulo de inversiones programado puede rondar los 400 millones de euros, lo que supone duplicar las previsiones dibujadas para 2021. Hay que recordar que muchas de las sumas fijadas para este año no se han materializado.
De hecho, es de destacar la ausencia de partidas significativas para proyectos largamente demandados y comprometidos, como es el caso de los Baños del Carmen, para el que vuelven a aparecer 100.000 euros, y el acceso norte al aeropuerto, para el que se consignan sólo 100.000 euros, frente a los 13,4 millones de 2021. Bien es cierto que, en este último caso, el proyecto final sigue pendiente de conversaciones con la Junta de Andalucía para coordinar esta obra con la del vial distribuidor.
No ocurre esto con la Biblioteca del Estado y la obra de rehabilitación del Convento de San Agustín, a la que se destinan 5 millones de euros. Actualmente, el Ministerio de Cultura está analizando las ofertas presentadas al concurso de ejecución de estos trabajos.
Una infraestructura aparece como protagonista indiscutible de las cuentas estatales: la renovación de la línea ferroviaria Bobadilla-Algeciras, en el marco de los trabajos en el Corredor Mediterráneo. A esta actuación se destinan 227,4 millones de euros. Es, por volumen económico, la gran apuesta del Ejecutivo de Pedro Sánchez.
El capítulo del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), que vuelve a ser el motor de la inversión planteada, recoge un total de 269 millones. A la partida de la Bobadilla-Algeciras hay que añadir algo más de 26 millones para las líneas de Cercanías de la provincia, sin que se concreten operaciones precisas.
Esto hecho impide saber si dentro de este paquete se incorpora la histórica demanda de los sectores empresariales malagueños de prolongar la línea ferroviaria entre la capital de la Costa del Sol y, al menos, Marbella, que sigue siendo la única ciudad de más de 100.000 habitantes sin tren.
Salvo que haya variaciones en los planteamientos del Gobierno, la decisión de dar respuesta a esta reclamación se hará mediante la extensión de la actual línea de Cercanías, que llega hasta Fuengirola. Por otro lado, Adif incluye 10 millones para planes transversales de trincheras.
Otro de los organismos estatales que vuelve a tener peso es Enaire, responsable de la explotación del aeródromo de Málaga capital, que cuenta con 44,5 millones. De esta suma, casi la mitad, 21,6 millones se reservan para la mejora de la seguridad de las personas e instalaciones; otros 7,5 al incremento de la seguridad operacional, y 7 millones en tareas de apoyo y reposición.
El plan de inversión del Puerto de Málaga es también destacable. Son 18,1 millones que van a permitir al organismo malagueño impulsar, por ejemplo, la construcción del muelle 9, con el que se espera ampliar en cerca de 100.000 metros cuadrados su actual superficie logística.
Para ello, cuenta con 4,3 millones para nuevos muelles y atraques. Y también parece que va a poder activar el año que viene los trabajos de reparación en el espaldón del dique de Levante. Dispone de 2,9 millones.
En materia de aguas, las actuaciones son mínimas. La excepción son los 8,8 millones de euros para los trabajos de saneamiento y depuración en Arriate, Benaoján, Montejaque, Jimera de Líbar y Cortes de la Frontera.