Semana tensa la que están viviendo los funcionarios de la cárcel de Alhaurín de la Torre, en Málaga. Después de dos cacheos complicados durante el martes y el miércoles, este jueves por la mañana se ha producido un nuevo intento de motín por parte de los presos del módulo 6. Tal y como apuntan fuentes penitenciarias, "la situación en la prisión de Alhaurín de la Torre es brutal y muy crítica ante la falta de personal y la antigüedad de las instalaciones".
Según informa la Asociación Tu Abandono Me Puede Matar, durante la noche del miércoles al jueves, un interno salió al hospital tras, supuestamente, sufrir un golpe en el interior de prisión. Durante la madrugada fue devuelto al módulo en vista de su estado de salud, según apuntan las mismas fuentes.
Sin embargo, al despertarse, el preso comunicó a los funcionarios que tenía que volver al hospital, puesto "que se lo habían mandado por escrito". Los funcionarios consultaron el informe médico y, supuestamente, no encontraron "nada de lo que decía el preso", sino que "se le daba el alta para volver al centro penitenciario".
Ante la negativa de los funcionarios de prisión, sobre las diez y media de la mañana de este jueves, el preso se puso violento alegando que "tenía que salir al hospital, que es su derecho". Unos minutos después, los funcionarios comprobaron cómo el mismo preso había revolucionado a más de la mitad del módulo 6, conformado por 88 presos.
Según la misma asociación, los presos les gritaron a los funcionarios que "eran unos perros", "que le dejaban morir allí" por no permitirle salir al hospital. "Se ha producido un gran alboroto. Hemos reconducido la situación con mucha psicología. Hemos tratado de separarlo del resto y lo hemos trasladado a aislamiento previa visita a la enfermería para que le revisaran los médicos, obviamente", explican.
Desde la asociación Tu Abandono Me Puede Matar piden más medios, puesto que en el momento del motín eran solo tres trabajadores en el módulo -tuvieron que pedir refuerzos de otros módulos- y solicitan que se les considere agentes de la autoridad y, sobre todo que "se nos respete en nuestro trabajo, que somos un pilar fundamental del Estado". "Si nosotros no estuviésemos aquí toda esta gente saldría igual o peor que como entraron", añaden.
Aunque la situación se está tranquilizando a esta hora del mediodía, desde la misma asociación aseguran que no quieren cantar victoria, puesto que no saben si todo puede volver a complicarse durante lo que queda de jornada. "La situación ha sido grave y muy tensa, podía haberse montado una muy gorda", zanjan.