El acuerdo que en los últimos días ha dejado a muchos ojipláticos en la localidad malagueña de Manilva cierra sus últimos flecos. Después de que el popular José Manuel Fernández fuera investido alcalde con los apoyos de Vox e IU, se ha constituido el organigrama municipal en el que el PP y los cuatro ediles de izquierda que fueron expulsados de su partido este domingo gobernarán en coalición. El único concejal del partido ultra, por su parte, queda en la oposición. 

El equipo de gobierno para los próximos cuatro años está formado por cuatro ediles del PP y cuatro ex de IU, que forman parte del grupo de no adscritos. Los ocho ediles gobernarán minoría el Pleno del Ayuntamiento de Manilva, donde la mayoría está fijada en nueve concejales.

En las elecciones del 28 de mayo el partido más votado fue Compromiso Manilva, con cinco concejales. La formación, creada tras separse de IU, llegó a un acuerdo con el PSOE para gobernar, aunque tampoco alcanzaban la mayoría. El pacto a dos bandas del PP con IU y Vox le dio la alcaldía a Fernández. 

A las pocas horas de la investidura, la dirección provincial de IU anunció la expulsión de sus cuatro concejales de Manilva por apoyar al PP en la contra las normas de la organización. Los ediles justificaron su respaldo al candidato popular escudados en la necesidad de regeneración municipal y la lucha contra la corrupción.

Mario Jiménez, el candidato de Compromiso Manilva y alcalde durante los últimos seis años, está siendo juzgado actualmente por su presunta implicación en la concesión de contratos municipales al marido de la anterior regidora, Antonia Muñoz, condenada por una trama de enchufismo que ha detectado hasta 749 contrataciones ilegales.

El único edil que logró Vox, Antonio Marín, se sentará en el banco de la oposición, como ya anunció tras defender que el apoyo a la investidura del PP es "el mejor acuerdo" por "higiene y transparencia política"; pero se mantiene en la oposición "como garante del buen hacer, realizando una fiscalización continua".