La sequía tiene sumida en una grave situación a todo el sector agrícola de la provincia de Málaga. Entre los más afectados se encuentran los regantes del Valle del Guadalhorce, donde sus cultivos corren el peligro de perderse este verano.
Cuentan con seis hectómetros para la temporada estival que pueden usar a partir de junio. Con esta dotación para un riego de emergencia, junto con el calor que acompaña a esta época hace que su primera conclusión sea que “los cultivos se van a morir" en los próximos meses.
Cítricos, hortícolas y tropicales son algunos de los cultivos que se reparten en las zonas agrícolas de la comarca. Su mayor miedo se centra en perderlas porque para algunos es el sustento diario de sus hogares y para otros es una tradición que lleva en sus familias generaciones.
“La situación es límite”, sostiene Salvador Aragón, presidente de la Comunidad de Regantes Acequia del Guadalhorce. Lleva toda su vida en el campo y vive en una incertidumbre constante porque no sabe si los 50.000 kilos de albaricoques, que habitualmente recoge en cada temporada, van a sobrevivir o no.
Ahora, su visión a futuro no llega más allá del próximo mes de septiembre, ya que prevé que “las plantaciones van a morir” si no consiguen algo más de agua. “Los seis hectómetros dan para un riego y nosotros necesitamos dar tres riegos para salvar las plantaciones”, remarca el agricultor.
La situación actual le recuerda a la que vivieron durante la sequía de los 90. Por aquel entonces sólo pudieron dar un riego de emergencia a las plantaciones. Esto hizo que al final del verano se perdieran el 70% de los cultivos de la zona.
En este punto coincide con él Agustín García, presidente de la Comunidad de Regantes Arroyo Brajea, y añade que la diferencia del pasado con el presente reside en que las lluvias de Semana Santa salvaron los árboles y ahora mismo están “húmedos y hermosos”. Eso sí, su situación es “peor que el año pasado”.
Su comunidad de regantes está compuesta por 21 hectáreas de cítricos y hortalizas. Estos cultivos no están dando frutos porque los trabajadores del campo han decidido dejarlos en los árboles. “Con el kilo de limón a 11 céntimos, al agricultor no le compensa recogerlo”, apostilla García.
De igual forma, García sostiene que tampoco saben cuánta agua de esos seis hectómetros podrán aprovechar. Después de estar varios meses sin echar agua en las tuberías no saben con certeza en qué estado se encuentran. A lo que también se suma el hecho de que “van a tener que echar una gran cantidad de agua en la cabecera para que llegue a la cola” y "todos vamos a querer regar".
Soluciones para aguantar la humedad
García tiene 100 árboles, los cuales ya da casi por perdidos. Para intentar que aguanten el verano, ha optado por pintar los troncos y las ramas más grandes de blanco, una medida que ya pusieron en funcionamiento algunos agricultores de la Axarquía el año pasado.
“Coges cal en terrón, le echas agua hasta ponerla en la textura que quieras y con una brocha blanqueas los árboles”, explica el agricultor. También añade que esta medida, aparte de reservar a los árboles del calor, elimina los hongos que puedan tener.
Por otro lado, desde la Asociación Provincial de Regantes de Málaga (Aprema) hacen hincapié en que esta Semana Santa ha sido “espectacular” en lo que a lluvias se refiere, pero “el campo sin agua se muere este verano”. Asimismo, inciden que el sector está de acuerdo con la llegada de las aguas regeneradas a la comarca, pero remarcan que “llegarán en unos años” y ellos necesitan una solución a corto plazo.
Solicitan más agua
Hace unos días, los agricultores se reunieron con el secretario de Agua de la Junta de Andalucía, Ramiro Angulo, para solicitarle un aumento de la dotación de agua que tienen asignada.
Desde la Junta sostienen que sus reservas se aumentaron de cinco a seis hectómetros en el último Comité de Sequía. Asimismo, señalan que este volumen podría ser revisado en función de la evolución de la situación hidrológica de la provincia. Por lo que hasta el próximo comité, que se celebrará en junio, no se sabe si los agricultores de esta comarca tendrán más agua o no este verano.