Triste desenlace en la desaparición de Encarnación Domínguez, una vecina de la barriada malagueña de Sixto a la que su familia perdió la pista el pasado martes al mediodía. Este jueves por la noche, se hallaba su cuerpo sin vida en la Desembocadura del Guadalhorce, justo a la espalda de los estudios de Canal Sur, en Málaga capital.
Según han explicado fuentes consultadas a EL ESPAÑOL de Málaga, un joven se cruzó con la mujer, que padece alzhéimer, a unos metros del puente de madera que hay en la desembocadura del río Guadalhorce. La vio algo aturdida, le ofreció agua y le preguntó si podía ayudarla. Así, siempre según las fuentes, la mujer le dijo que ya estaba llegando a casa --no era cierto, estaba desorientada-- y que se encontraba bien.
Este jueves, el joven descubría que la señora a la que atendió estaba desaparecida y avisó a las autoridades e incluso a su propia familia, que acudió de inmediato a la zona con él para tratar de recrear los pasos que pudo dar Encarnación junto al dispositivo de búsqueda. Sobre las nueve de la noche, en una zona campestre, justo detrás de los estudios de Canal Sur, era localizado el cuerpo sin vida de Encarnación. Ante la gravedad de lo ocurrido, se le ha ofrecido apoyo psicológico al chico que la vio por última vez con vida, pues se siente culpable de no haber podido hacer nada por evitar su triste final.
La última pista
La última imagen con vida que la familia tenía de Encarna era el vídeo de una cámara de seguridad que les habían cedido desde el Chiringuito Casa Lucas, en el paseo marítimo Antonio Banderas, donde se observaba a la mujer caminando a paso rápido hacia Sacaba.
En la grabación el reloj marcaba las 12.08 horas del martes 14 de mayo. Sobre la una, el chico la localizaba en la desembocadura, por lo que todo apunta a que la mujer ha estado en el mismo punto desde el día de su desaparición.
No era habitual que Encarnación saliera a pasear sola, únicamente lo hacía por su barriada, pero este martes se levantó animada y decidió salir sola a dar un paseo. El domingo previo había estado acompañando a toda su familia en la comunión de su nieta. De hecho, la fotografía que colgaba en los carteles que alertaban de su desaparición fue tomada ese día.
La hipótesis de la familiar era que en algún momento tuvo que desorientarse, por lo que desde el martes, su familia ha estado recorriendo todo el litoral malagueño en moto, a pie y en coche. No ha sido hasta este jueves cuando han puesto fin a su calvario con la peor noticia posible.