A mediados del año 2004, el Grupo Joly abrió una nueva cabecera en nuestra provincia: Málaga Hoy. Y, para darse a conocer entre la población, regaló una colección de platos de inspiración picassiana. Ante el éxito cosechado, el periódico se promocionó con juegos de café, mantelería y cubertería. Un ajuar con el que el genio malagueño dejó involuntariamente su impronta en las mesas de la mitad o más de los vecinos de la provincia.
Pues bien, si es usted alguno de los que renovaron su vajilla por aquel entonces con aquella mítica promoción, pero hoy sus platos ya han perdido el brillo y el lustre después de años y años de uso, no se desespere, Zara Home ha venido a solucionar el entuerto.
Y es que la marca de Inditex especializada en democratizar la belleza en el hogar medio ha lanzado una colección de menaje inspirada en la vida y obra de Pablo Picasso que, parece ser, vuelve a estar de moda y de cuyos pasos por la ciudad dimos cuenta hace poco aquí, en EL ESPAÑOL de Málaga.
Una colección inspirada en la conexión de Picasso con el Mediterráneo, la costa francesa, el verano, su primera hija Maya, y en la que la caligrafía del artista más importante del siglo XX se estampa en los textiles que Zara Home ha diseñado con mucha clase.
Verla es quererla
La propuesta de la marca es que la colección recuerde al tiempo que Picasso y su familia pasaron en su casa de verano entre las colinas de Cannes, en la villa La Californie. Allí, el genio pasó mucho tiempo escondido, feliz, rodeado de sus hijos, dos adorables perros y Esmeralda, una traviesa cabra.
De este modo, y en colaboración con Picasso Estate, la firma gallega presenta una propuesta inspirada en la relación del pintor con Maya, musa de innumerables obras, que se estampa en textiles y cerámicas. Además, se estable un recorrido sensorial por la casa que mantiene muchos elementos originales, a la vez que se explora la faceta no tan conocida de poeta del artista.
Usando de base la exposición Maya Ruiz-Picasso, hija de Pablo, que recopila una selección de obras y poemas del artista en relación con su primogénita, y de fotografías de sus momentos más queridos en esta villa, esta colección presenta una serie de piezas inspiradas en el día a día de la familia de Picasso en el sur de Francia.
Mantelería y vajilla
Así, en las jarras y jarrones de cerámica blanca y en los platos se leen palabras del autor, en francés y español. Los manteles y paños de algodón con rayas rojas y azules son un guiño a la camiseta marinera con la que muchas veces posó el genio malagueño. Y para vestir el sofá, una manta y cojines ilustrados con algunas de sus obras.
También, junto a los productos de menaje, encontramos láminas ilustradas con las obras en las que el artista retrató a su hija de niña, libretas y una bolsa de tela con mensajes de su puño y letra. Y de este modo, sin tener que viajar a París para ver la exposición, nosotros también podemos tener un pedacito de Picasso, si no en nuestras paredes, sí en nuestras mesas.