La luz parte por la mitad el plano, iluminando en el centro de la imagen a una mujer. Lleva unos pantalones cortos de camuflaje, una camiseta blanca y la pena cosida al rostro. Es una niña, una joven. De edad indeterminada y llanto pegado a sus mejillas. El motivo de su lamento se encuentra a unos pocos centímetros; yace en un ataúd con la tapa abierta, decorando la tanatosala un centro de flores y una bombilla oculta en una tulipa color caramelo. El resto del plano es pura pobreza. Entre colillas y botellas de plástico, la protagonista llora la muerte de su marido, asesinado posiblemente por una riña entre cárteles de la mafia filipense.
La imagen fue tomada por Adam Dean en 2016, y es una de las 57 que componen la última exposición del centro cultural La Térmica, Women, un siglo de cambio. La muestra, que estará abierta al público hasta el próximo 5 de mayo, es un viaje fotográfico a través del tiempo y los continentes con las mujeres (y sus realidades) como protagonistas.
La selección procede del archivo fotográfico de National Geographic de los últimos 130 años y ha sido escogida de una antología de final de más de 400 imágenes. La mirada encargada de filtrar esta masa ha sido Marisa Flórez, mítica fotoperiodista de EL PAÍS y uno de los personajes claves de la profesión durante la transición.
“Comisariar imágenes de fotógrafos tan prestigiosos hace que parezca que nada pueda fallar, pero darle recorrido y ser capaz de transmitir es complicado. Da un poco de yuyu”, confiesa Flórez.
Alegría, belleza, amor, sabiduría, fortaleza y esperanza. Estos son los hilos argumentales en torno a los que se construye este siglo de transformación. Mujeres de color, blancas, adolescentes, adultas, ricas y pobres que consiguen “demostrar” sus sentimientos: “La grandeza de cualquier autor reside en la capacidad de mimetizarse y volverse invisible, sin intervenir para que los hechos sigan fluyendo, pero siendo un (espectador) privilegiado”, describe.
Imágenes inéditas
Esta evolución sintetiza la diferencia entre ver y mirar; pero también habla de cómo las mujeres pasaron de ser “meros objetivos” a incorporarse a las fábricas durante la I Guerra Mundial. La clave, según Flórez, está en el binomio que se establece entre “los fotógrafos al fotografiar y las mujeres al ser fotografiadas”: “No podemos olvidar el recuerdo de dónde venimos, lo que se ha ido ganando y hacia dónde vamos”.
Un recorrido, un viaje itinerante de los sentimientos, formas y sensaciones. El olimpo del multiculturalismo permite compaginar los labios rojos de una geisha (recreando una suerte de bandera nipona en su boca) con una madre que abraza a su hijo, con los ojos arrancados por las rencillas entre clanes.
Y detrás de todas ellas, el voyeur. En total 22 mujeres y 25 hombres, aunque destaca Flórez que “la forma de mirar” está más en el individuo que en el género. Una de esas firmas es la de Eliza Ruhamah Scidmore, primera fotógrafa que publicó imágenes coloreadas en National Geographic.
Además, de ser la toma más antigua de la exposición (1918), se trata de una instantánea inédita, a la que acompañan otras como la de Jodi Cobb de 1998 que refleja a la abogada, escritora, presentadora de televisión y modelo Wendy Fitzwilliam, que fue Miss Trinidad y Tobago, en este caso vestida para la categoría de ‘traje típico’ durante el concurso de Miss Universo; y otra de Randy Olson de 2007 en la que unas colegialas en Ghana ayudan a preparar la inauguración de la clínica de Maternidad Maranatha llevando sillas a la ceremonia
La parte museística permite observar planos como los conseguidos por Lynsey Addario, quien, además de viajar en varias ocasiones a Afganistán para documentar la vida y la opresión de las mujeres que viven bajo el régimen talibán, ha cubierto todos los conflictos importantes y crisis humanitarias de su generación, incluidos Afganistán, Irak, Darfur, Libia, Siria, Líbano, Sudán del Sur, Somalia y Congo.
La selección ha pasado por National Geographic Museum de Washington, el Reial Cercle Artistic de Barcelona y el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM) e incluye retratos de mujeres que han desempeñado un papel destacado en la historia reciente. Tras el instante se encuentra el objetivo de nombres reputados que han trabajado para National Geographic: Amy Toensing, Ami Vitale, Newsha Tavakolian, Lynsey Addario o la propia Marisa Flórez.
Ciclo de conferencias
Este miércoles tuvo lugar la mesa redonda en la que participaron Marisa Flórez, comisaria de la exposición; Mariló Maldonado, directora y presentadora de La Tarde de Canal Sur Radio; Daniel Pérez, presidente de la Asociación Malagueña de Informadores Gráficos de Prensa; María José Pérez, delegada de Inspiring Girls; y Noelia García, doctora en Historia del Arte y profesora de Fotografía en la Escuela de Arte San Telmo.
Además, durante los meses de marzo y abril, La Térmica proyectará una serie de documentales de National Geographic sobre el empoderamiento de la mujer en la sociedad: ‘Mujeres que cambiaron el mundo’ (14 de marzo), ‘Actívate: El movimiento Global Citizen’ (21 de marzo), ‘Mujeres luchadoras’ (28 de marzo), ‘Jane Goodall: La gran esperanza’ (11 de abril) o ‘Dian Fossey: Mi vida entre gorilas’ (18 de abril), entre otros.
Nota: las imágenes que aparecen en el encabezado del artículo son obra de Eliza R. Scidmore, Fred Schutz, Lucien Gauthier y Amy Toensing.