Netflix acaba de estrenar 13 días, la serie documental donde tratan el caso del pequeño Julen Roselló, el niño que se precipitó por un pozo ilegal en la localidad malagueña de Totalán mientras jugaba. La pesadilla para su familia se inició el 13 de enero de 2019, pero se alargó durante trece insufribles días que se van dibujando en esta pieza audiovisual, que está producida por Secuoya Studios y dirigida por Hernán Zin.
En palabras de su director, se trata de "una serie única" que va a "conmover" a los espectadores que decidan verla. En el documental hay todo tipo de voces, desde los propios padres, hasta voluntarios, periodistas o miembros de las fuerzas de seguridad. Todo está narrado de manera cronológica, desde el minuto que la madre de Julen llama al Servicio de Emergencias 112 de Andalucía, hasta que las autoridades logran llegar hasta el punto del pozo donde yacía el cadáver del pequeño.
Tiene tres episodios (50') en los que se refleja el calvario de los protagonistas: José y Victoria, los dos malagueños padres del pequeño Julen. También habla Ángel García Vidal, coordinador técnico del rescate; Sergio Tuñón, exjefe de la Brigada de Salvamento Marítimo o el propio Nicolás Rando, el miembro del equipo de Montaña de la Guardia Civil que rescató el cuerpo de Julen.
El director de esta producción, nominado a los premios Goya, Emmy o Grammy, cree que es una pieza que "redefine el género true crime", pues se cuida muchísimo el trato a las víctimas, la visión estética y su humanidad. "Nos refleja como sociedad, con nuestras luces y sombras", ha añadido en un comunicado. En la dirección de producción, cuenta con la bestial ayuda de Fausto Bastida y en la producción ejecutiva, con Eduardo Escorial, David Gallart y Guillermo Ríos.
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