La de este lunes ha sido una de esas noches en las que entre serpentinas y papelillos me he dicho a mí misma: "¿Por qué mi ciudad sigue sin valorar su bendito carnaval?". A todo el que le planteo esta pregunta me dice que el Carnaval de Málaga tiene menos nivel que el de Cádiz, que no tiene gracia... Sin embargo, el 99% de los que se refugian en estos comentarios nunca se han parado a comprar una entrada y disfrutar de una sesión en el Cervantes. A todos ellos, les invito en este comienzo de crónica a hacerlo aunque sea una vez en la vida, porque quizá cambien de opinión viviendo noches como la de hoy, donde hay quien se ha emocionado con un pasodoble de la Comparsa de Málaga a la par que ha llorado de risa con el Susi o Rute. Cómprense unos anacardos y vengan a escuchar mi carnaval, aunque sea a partir del día once por las callejuelas del centro. Dicho esto, que me apetecía decirlo, menudo menú el que se ha cocinado este lunes en las tablas del Cervantes, donde se ha reunido lo mejor de cada casa:
Murga infantil Enred@d@s
Los influencers de Paqui Prieto volvieron a hacerse con el público malagueño. Para algunos de ellos era la primera vez sobre las tablas del Teatro Cervantes. Ejemplo de ello es el pequeño Carlos, hijo del comunicador Carlos Pariente, que llegó a quedar algo impactado con la belleza del teatro y el ruido del público. Otros con algo más de experiencia, en cambio, se crecían, casi pisando las flores que decoran el filo del escenario para alcanzar a ver las caras de orgullo de sus padres sentados en los palcos.
Paqui Prieto ha criado a varias generaciones de carnavaleros y se ha adaptado a ellas, que no es sencillo. Este año, ha tenido que incluso ceder con los niños, que han metido en el estribillo una de las modernas coreografías de TikTok y han llenado el popurrí de cuartetas con música que ellos mismos escuchan en casa.
Con el mismo repertorio de preliminares, volvió a clavarlo Alvarito con la melódica y menudo sentimiento le puso Manuela a su interpretación. "Que no, que no, que no me da la gana, que yo me quedo aquí hasta por la mañana...", cantaron al final de su popurrí a modo de declaración de intenciones y mientras recibían los dieces del jurado. En el teatro hasta mañana, lo dudo; pero esperamos que os quedéis mucho tiempo en nuestro carnaval, queridos.
Comparsa La llamada - La Línea de la Concepción
Los hombres de la Naturaleza echaron raíces en el Cervantes con sus magníficas y potentes voces. Cómo pían estos gaditanos, que quisieron dedicarle unas palabritas a Málaga, la tierra que les ha llevado a semifinales.
Sin embargo, destacó más el segundo con un planteamiento interesante en el que reflejan cómo los humanos hemos aprendido a normalizar fríamente asesinatos machistas, guerras o agresiones homófobas mientras nos llenamos de los momentos que nos ofrece la telebasura. "Qué más da que un niño muera, si mañana yo desconecto y me trago contento mi telebasura, bendita locura, la que adormece mis cinco sentidos y les pone un disfraz, los calla y los censura".
De los cuplés, siendo estos de comparsa, yo no puedo evitar quedarme con los maravillosos coros. Al hacer referencia a Hacendado, la segunda fila cantaba "¡Mercadona!". En el segundo, al mencionar a Cristiano, esta decía "Suuu" o al nombrar a Rosalía respondía con un "Tratrá". Por no hablar del momento en el que hablaron del Rey don Juan Carlos, cuando dijeron: "¿Por qué no te callas?". De 10 este divertido detalle.
Buen paso por el concurso el de La llamada. Pase lo que pase de cara al viernes, que sepáis que esta es vuestra casa.
Murga Los Malapipa
El Cervantes sabía que se cumplían tres años sin la Murga del Susi en sus tablas y rugía minutos antes de que salieran a escena. "Lleváis haciendo tipo to' la vidaaa", gritaban desde uno de los palcos.
Metidos en el tipo a rajatabla de principio a fin, los de San Andrés firmaron una actuación redonda en la que cayeron hasta papelillos, con el coraje que les da a ellos tener que barrerlos en carnavales. El mismo coraje que le da tener que limpiar la cera de los cirios de Semana Santa o que en El Rocío la gente se pegue puñetazos por saltar la reja. "¿No será más fácil abrir la puerta?", dicen.
Tras una divertida presentación donde hablan de su profesión como barrenderos y su espectacular sentido del humor, la agrupación fue a por los pasodobles. Buen recordatorio de que quieren un presidente electo el que mandaron a la Fundación en el segundo, todo ello tras hacer un repaso de los grandes históricos de nuestra fiesta: "Que tiemble el Dios Momo y sus tres chivatos, queremos un presidente, elegido por mi gente. Que no se le olvide a nadie, que sin los grupos malagueños, no hay carnavales, no hay carnavales".
También estuvieron bastante simpáticos los cuplés, especialmente el segundo. En él, le dicen a Francisco de la Torre que está un pelín cuajado cogiendo alúas y le proponen que se vaya buscando una de esas clásicas puertas giratorias para ir camino de la jubilación y a "vivir del cuento". "Pero en la puerta giratoria, dando vueltas el tonto... se queda dentro", cantaron con gracia.
Previo a un popurrí repleto de pegotes, de lo mejor metido en el repertorio es el estribillo, que coreó todo el teatro a la vez tal y como ocurrió en preliminares: "Una esquina oliendo a meao, un campero tirao, un mojón pisao, un chicle pegao, un montón de latas y botellas vacías... el estribillo es una porquería". Buena vuelta del Susi. Enhorabuena por esta murga que grita Málaga por los cuatro costados.
Comparsa juvenil 'Déjame que te cuente' - Málaga
Los escritores pasaron página del cuento que están escribiendo este carnaval. A los chavales de Javi y Pauli les tocaba afrontar el Capítulo II de este COAC y lo más importante, había que contárselo al Teatro Cervantes.
Qué bonito y emotivo ese primer pasodoble a cómo se prepara un chiquillo para llevar por primera vez a hombros a su Sagrado Titular. "Soñaba que algún día podría portar al cristo que tanto amaba como mi padre lo hiciera también cada mañana. Por fin el día, el día llegaba, y aquí me tienes ya listo en el varal. Abrid las puertas, que quiero sonar. Vamos, campana, empieza a sonar", cantaron, representando el sueño de cualquier niño cofrade.
Qué buen trabajo el que está haciendo esta agrupación por el carnaval y la cantera llevando a escena un conjunto tan bien hecho y tan trabajado con voces como la de la propia Pauli o la de Isabelita. De lo mejor del grupo, esa delicia de popurrí, tan variado y completo. La cuarteta donde comparan a Pinocho con los políticos es particularmente excelente: "Si más de uno estuviera en un cuento, se daría a conocer. Pues su nariz no pararía de crecer, ya que nos mienten y nos engañan para llegar al poder. Aunque solo sea un niño, yo no miento y siempre digo la verdad, y aunque te cuente un cuento recuerda, que los borrachos y los niños siempre dicen la verdad... Y yo no bebo... no tengo edad". Felicidades un pase más y enhorabuena por no perder vuestra cara de ilusión en ningún momento.
Comparsa 'Los Maomas sin H' - Málaga
Los maomas sin H, para que ustedes me entiendan, es una de esas comparsas que cualquier carnavalero se pondría en el coche. Una de esas comparsas que te pueden acompañar en tu peor o en tu mejor momento, pero ahí están siempre. Permanecen en el tiempo. El pase de semifinales que firmó el grupo fue particularmente brillante, incluso más que en preliminares en cuanto a voces.
Un crítico pasodoble contra "la mayor lacra de la sociedad", la violencia machista, dejó sin habla al público tras hacer varias referencias al vídeo del Colegio Mayor de Elías Ahuja: "¡Y basta ya! Los jóvenes que humillan hoy a esas chicas como si nada, serán naciones con las rancias leyes que aún las maltratan, serán partidos que niegan esta maldita lacra".
Sin embargo, a la que escribe esto se le reblandeció el corazón al ver aparecer a los hijos de varios integrantes de la comparsa sobre las tablas, particularmente a Antonio Carlos Junior, que ya es conocido en las redes a su corta edad por ser todo un jartible del Carnaval de Málaga. Mientras que su padre y sus colegas le dedicaban una bonita copla a sus hijos, este tocaba el pito a diestro y siniestro mientras toqueteaba su bonito disfraz. "Tu vida es tuya, y tuyas sus vereas; así que vívela, ¡sé lo que quieras! Que yo cumplí ya mi sueño al cantar, a boca llena, “mi niño es carnavalero”", remataron.
Los de Miguel Gutiérrez han optado por el nombre de Los maomas sin H para recordar a la primera agrupación que surgió en el Carnaval de Málaga tras la dictadura de Franco, allá por el 1979. "Herederos de una murga, nace mi comparsa..." Pese a que parece que recuerdan al aficionado la historia de la fiesta desde la presentación a la última cuarteta, al final le desvelan que el mismo repertorio es válido en 2023 después de la transición vivida en la Fundación aunque todos los que lo oigan crean que hablan de tiempos dictatoriales.
"Y mientras el pueblo espante, al cantar, sus males... Cantará el carnavalero sus males en Carnavales por la ley del pueblo". Chapó y felicidades. Esto es de podio muy alto.
Murga 'No me pises que llevo chanclas' - Rute
Si hay un grupo que la lio bien fuerte durante la noche del lunes ese fue el que conforma la Murga de Rute, o quizá debería decir Rute's Murga, puesto que ahora son unos hinchas guiris que disfrutan de la Costa del Sol desde la terraza de un hotel -y amenazan con lanzarse al vacío en más de una ocasión porque ellos tienen "muy buena caída"-.
Rute lleva años viniendo con un repertorio competitivo a Málaga, una tierra, como ya comentaron en preliminares, que consideran como suya. Tras quedar quintos el año pasado con El tiempo entre costuras, este año el grupo ha sabido jugar muy bien sus cartas, algo primordial en un concurso así, y salvo sorpresa de mal gusto, estarán en la final y con podio. O al menos es lo que se merecen.
Se lo merecen por pasodobles como el segundo que han cantado, con una ironía muy bien hilada. Hablan de Málaga como la ciudad del extranjero, pero desde sus propios ojos, los de un guiri. "El Perchel apesta. Derribadlo por favor, como hicisteis en su día con La Coracha... y las viviendas vacías remodeladlas que quiero pisos turísticos de ocasión. Una nueva Benidorm a costa del sufrimiento del malagueño, que se queda sin futuro y sin privilegios. Esta ciudad es para mí. ¿Quién va a acordarse de ti?, si es inglés hasta el cementerio". Brillante el ingenio de estos guiris, que decidieron cantar la parte seria de sus pasodobles sin acento guiri, lo que mejora la vocalización. Bien, Rute, bien. También le cantaron a la violencia machista, un tema al que prácticamente la mayoría de los grupos han cantado en este pase.
Los cuplés también estuvieron divertidos. En el segundo, siguen sabiendo que pese a ser cordobeses participan en Málaga y le dedican unas palabras a De la Torre, quien, según el grupo, podría acabar siendo un cíborg como siga cumpliendo años en el mandato... o no. "Me lo imagino en su despacho o en algún pleito robotizado y hablando así como Terminator. ¡Sayonara, Huelin! Si lo piensas seriamente Paco puede ser un cíborg, él camina very recto, se parece a Robocop. Es muy mecánica. Cuando habla no tiene acento. Jamás comete un error. No cambia de cara. Siempre está atento. ¡Qué no! Que no es un robot. El alcalde es sieso de nacimiento", cantaron, con arte.
El popurrí sigue estando repleto de pegotes y mucho cachondeo e interacción con el público. Como diría mi amigo Jorge Salinas, esto entra en mis propuestas irrechazables del Carnaval de Málaga.
Comparsa 'Los del otro barrio - Málaga
Qué alegría me da que existan 'contracomparsas' como esta. En chándal, naturales, en la calle, representando a la gente normal de Puerta Blanca, La Luz o Huelin. ¿Qué es el carnaval si no es representar a la gente corriente? Varios problemas técnicos que cuentan en uno de los cuplés hicieron que el vestuario de esta comparsa luciera más lowcost de lo que esperaban, pero finalmente se ríen de sí mismos y aseguran que si todo el mundo copia a Los Patronos, ellos lo hacen también, pero en lugar del tipo de cuando van con ropa de calle.
Godoy, Malo y Pino son un dreamteam y han vuelto a dar en el clavo. La musicalidad que tiene este grupo ya les gustaría a otros. Cómo se queda ese soniquete y qué gustoso es que te apetezca oír en varias ocasiones un popurrí de comparsa y que no te entren ganas de echar una cabezada. Qué me gusta, insisto, esa cuarteta a los vecinos. "En el octavo vive Adrián, que se odia ante el espejo, y en consuelo de Julián, se le aplacan los complejos", cantan.
De los pasodobles, resulta verdaderamente especial el que dedican a la violencia machista. Como decíamos antes, ha sido el tema de la noche, pero quizá sea este grupo que lo trate de la manera más original, utilizando nombres femeninos que dan título a calles y barrios malagueños. "A Bárbara en un Polígono hicieron daño
y a Virginia en una Playa... le ha pasado también a Carmen en unos Baños y Aurora por su Avenida anda asustada. Paula es acosada en su trabajo por su patrón los días que va arreglada... Un padrastro que golpea porque no es virgen Belén y un Pasillo de miradas que acojona a Isabel... Si hasta a echarse Colonia le ha cogido miedo Inés ¡Basta de una Santa vez!". Así, rematan asegurando que las mujeres no quieren que sus calles lleven sus nombres, sino que "solo quieren recorrerlas sin que un hombre las avasalle".
Me gusta todo lo que reivindique y esta comparsa reivindica sin que sea necesario abrir la boca en cuanto sube el telón en cada pase. "El barrioooo, mi barrioooo, tu barrioooo", cantan al acabar, y ya estaría todo dicho, señoría. Todos los que somos de clase obrera vemos nuestro barrio reflejado en esta comparsa y en el alma de estos chavales. Como dicen en el estribillo, como alguien se atreva a pisotear a mi barrio de La Luz, "lo mando para el otro barrio". Gracias, gracias y gracias y ojalá teneros el viernes de nuevo.