Dicen que cualquier comparación es odiosa. O incluso, dentro de los topicazos también está el de cualquier tiempo pasado es mejor. Todos son aplicables al presente del Málaga CF y para el inquilino de su banquillo, que siempre es objeto de críticas y su trabajo es mirado con lupa se llame como se llame. Hoy José Alberto López, actual técnico blanquiazul, es cuestionado por un sector de la afición por el mal bagaje a domicilio del equipo. Sin embargo, el equipo marcha en mitad de la clasificación con 20 puntos, a cinco de los playoffs y seis sobre el descenso.
Lo cierto es que el desempeño del Málaga en las 15 primeras jornadas disputadas tiene una lectura clara, una dualidad muy diferenciada en el equipo. Cuando juega de local se muestra solvente y superior. Es el tercer mejor equipo de la categoría cuando defiende su feudo, donde no ha perdido, sólo ha encajado dos goles y suma 17 puntos de 21 posibles. El otro lado de su realidad es cuando juega fuera, donde es el peor de Segunda con sólo tres puntos de 24 posibles, sin ninguna victoria y con 16 tantos encajados.
El malaguismo vive en una montaña rusa constante. Pasa de encumbrar el buen hacer de José Alberto y su equipo cuando juegan de local, a las críticas más exacerbadas cuando lo hace fuera. Es resultadismo, pero el conjunto blanquiazul da motivos para ello porque la puesta en escena es totalmente diferente.
Números
Sin embargo, los números de José Alberto en este inicio de temporada no son tan malos como se podría prever a tenor de las críticas, que incluso algunas piden su cabeza. El técnico asturiano se mantiene en la línea de resultados que suelen tener los entrenadores blanquiazules con un 30-40 por ciento de partidos ganados. Es decir, ganar uno de cada tres partidos. En ese baremo se mueven técnicos como Peiró (39.73%), Juande Ramos (36.67%), Antonio Tapia (36.59%), Juan Ramón López Muñiz (35.44%), Sergio Pellicer (35.38%) o el propio José Alberto o Javi Gracia (33.33%).
Mejora considerablemente los dígitos ganadores de técnicos recientes que tuvieron mucho más apoyo público en su momento como son Víctor Sánchez del Amo, que tiene un 28.12 por ciento de victorias en sus 32 partidos al frente del equipo, o el propio Míchel (27.27%), que fue uno de los técnicos en el año del descenso a Segunda.
Por lo tanto, la eterna batalla contra el pasado seguirá ahora y siempre en el Málaga CF. Los números de José Alberto López como entrenador del conjunto blanquiazul son mejorables, pero la realidad de la entidad malaguista es la de un club que aún sigue intervenido por un proceso judicial, que arrastraba problemas con el límite salarial, que no ha podido contar casi con sus dos delanteros titulares en lo que va de curso y que ha perdido a su mejor jugador para toda la temporada por lesión. Ése es el contexto.
Vuelta al trabajo
En cualquier caso, el Málaga tiene ahora que demostrar que es un equipo fuerte en casa ya que tiene dos compromisos seguidos como local. El primero de ellos será ya el lunes, para cerrar la jornada 16. Por ello el equipo de José Alberto se ha tomado dos días de descanso y mañana vuelve al trabajo con la vista puesta en el duelo contra el Tenerife. Un rival que está tercero en la clasificación y que llega como un tiro. Un partido para comprobar si el Málaga de las dos caras es tal o si es sólo una ilusión pasajera del arranque del curso.