Ramón Enríquez coge de nuevo el timón. ¿Lo volverá a soltar? El centrocampista del Málaga ha recuperado el rol de titular desde la llegada de Pablo Guede al banquillo. Desde que Pellicer le diera galones al de Órgiva en el arranque de la temporada 2019-2020, las expectativas sobre el jugador se dispararon, pero cierta irregularidad, causada en parte también por las lesiones, bajaron el suflé sobre alguien que estaba llamado a gobernar el centro del campo malaguista. Con Guede, esa sensación vuelve a recorrer las gradas de La Rosaleda.
Ramón salió desde el banquillo en el partido contra el Valladolid en el minuto 70, cuando los pucelanos ya habían empatado el partido a dos. En los dos siguientes choques, el centrocampista ha formado parte de la medular blanquiazul junto con Jozabed, dotando a esa zona del campo de buen pie.
Más allá de los minutos disputados, el cambio percibido en el rol de Ramón dentro del equipo es el paso adelante dado en estos dos últimos partidos. Para ese paso adelante, el técnico lo ha rodeado de jugadores como Jozabed o Febas, además de colocar a Escassi en el centro de la zaga para mejorar la salida de la pelota, que pasa por Ramón en esta nueva etapa.
Hasta ahora, la mayor continuidad la había tenido Ramón en el peor momento de la temporada del Málaga, cuando encadenó seis titularidades entre la destitución de José Alberto y la llega de Natxo González, con quien fue protagonista en los primeros partidos. Pero luego desapareció de las alineaciones.
El ’6’ blanquiazul jugó de inicio entre la jornada 22 y la 27. Entre medias cayó José Alberto tras el bochorno contra el Ibiza (0-5 en La Rosaleda), y llegó Natxo, que tiró del granadino hasta el partido contra el Almería. A partir de ahí, Ramón ya no fue más titular y sus apariciones sobre el verde se diluyeron, reducidas a algunos minutos residuales.
En todo este proceso, el joven centrocampista ha protagonizado un cambio físico, ganando masa muscular, para sumar a la madurez que demuestra siempre que tiene la pelota en los pies, a pesar de tener solo 21 años.
Este viernes, el Málaga se medirá a Las Palmas en el Estadio Gran Canaria (21:00 horas) y todo apunta a que Ramón volverá a ser de la partida en un equipo que Guede está obligado a renovar por las bajas en defensa, pero que tiene el centro apuntalado con la presencia de Jozabed, Febas y el propio Ramón, que vuelve a asumir los galones.
Esta temporada, Ramón ha sido de la partida en doce ocasiones, completando los 90 minutos en cinco de ellas. En su casillero cuenta con un gol, el 2-2 frente al Sporting de Gijón en La Rosaleda que sirvió para rescatar un punto. Un disparo impecable con el interior del pie que le quitó las telarañas a la portería de Mariño tras recoger un balón suelto en la frontal del área.
En la retina del malaguista está todavía su primer gol de blanquiazul, verde y morado aquella tarde’, en Castalia. Una genialidad con el exterior del pie desde una esquina del área que hacía soñar con un nuevo ídolo. Está a tiempo. Tiene solo 21 años y toda la confianza de Pablo Guede.