Estaba llamado a ser uno de los estandartes del Málaga CF a medio plazo. Pero una lesión en el ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda el 30 de septiembre de 2021 frenó por completo su progresión del hombre elegido a liderar al equipo blanquiazul en las próximas temporadas. Es Luis Muñoz, que desde entonces no ha vuelto a ser el Luis Muñoz que esperaba La Rosaleda.
Ante la baja de Ramón, Pellicer inició un casting sobre la marcha para buscar un sustituto que llevara el timón de la nave malaguista en esta recta final del campeonato en el que el club busca la permanencia. Apostó el de Nules por Jozabed, como hizo en Lugo cuando el '6' se lesionó, pero lo retiró en el descanso en detrimento de Luis Muñoz. Cinco minutos tardó en ver la quinta amarilla que le impedirá estar en Ponferrada, y poco después pudo ver la segunda.
De esta forma, Muñoz deja pasar de largo la enésima oportunidad para convertirse en un jugador imprescindible en este Málaga, el que iba a ser su Málaga. El de Nueva Málaga es uno de los jugadores seguidos con lupa por la afición, especialmente tras su autoexpulsión en Albacete cuando el equipo había sido capaz de remontar el 1-0 con el que los locales habían abierto pronto el marcador. Un agarrón al borde del área rival le costó la amarilla, y la protesta consiguiente la valió la segunda y la capitanía del Málaga. Pellicer le ha retirado el brazalete, que incluso ha portado un jugador llegado en el mercado de invierno como Lago Junior. El entrenador malaguista explicó que era para quitarle presión de encima.
Muñoz está lejos de ser ese jugador imponente en lo físico que prometía en el centro del campo, con llegada, con potencia para romper líneas. No ha sido capaz de encontrarse en toda la temporada.
El curso pasado reapareció en plan Cid Campeador cuando al equipo le quedaban pocas balas para pelear la permanencia. Fue en Tenerife, donde se jugó su salud por el equipo, porque estaba muy lejos de estar plenamente recuperado. El Málaga se llevó los tres puntos y volvió a jugar en el duelo decisivo contra el Burgos en La Rosaleda, que acabó con el equipo salvándose a pesar de la derrota y el público de uñas con el Málaga. Su presencia era un mensaje claro: se dejaba la rodilla, y su futuro, por el Málaga CF, donde se había criado.
'LM8' había ampliado su contrato con el Málaga CF hasta 2025 la temporada anterior en un gesto de confianza del club.
Tras realizar la pretemporada a las órdenes de Pablo Guede, Muñoz todavía no estaba al cien por cien para dar lo que se esperaba de él, y a la tercera jornada, tras la victoria contra el Mirandés, tuvo que parar varias jornadas.
Reapareció en la jornada 9 contra el Andorra alternando titularidades y suplencias, pero su rendimiento siempre ha estado lejos de lo esperado. Esta temporada lleva jugados un total de 27 partidos, trece de ellos titulares y solo uno completo, en la derrota en La Rosaleda contra el Oviedo, ya a las órdenes de Pellicer.
En Lugo, cuando cayó Ramón, Muñoz se había quedado fuera de la convocatoria por molestias, pero ya contra el Huesca sí estaba disponible. Cuando Pellicer le dio la oportunidad, Muñoz volvió a quedarse lejos de las expectativas. Ahora descansará una jornada y tiene tres partidos por delante para remar por la permanencia de su Málaga.