La Policía Nacional ha detenido a 13 aficionados radicales del Málaga C. F. por su presunta implicación en los delitos de desórdenes públicos, daños y atentado a agentes de la autoridad ocurridos el pasado fin de semana, al finalizar el partido del club de Martiricos contra el Ibiza en La Rosaleda. 

Los sospechosos, según ha informado la Policía Nacional, estarían tras las barricadas del pasado 27 de mayo, junto al estadio, en las que se produjo el volcado de contenedores de basura y la quema de uno de ellos, entre otros incidentes. 

A la finalización del partido, correspondiente a la última jornada de la Liga Smartbank, una "marea de radicales" se concentró en el exterior del campo, junto a la grada de Fondo, esperando la salida de jugadores y directiva del club andaluz, con el objetivo de recriminarles el descenso de categoría del equipo. 

"Los seguidores ultras tenían la intención de cortar la única vía de salida por carretera, desde el parking interior del estadio a la avenida de La Palmilla, y así impedir la marcha del equipo", explican desde la Policía Nacional en una nota. En ese contexto, los ultras formaron una barricada, volcando contenedores e incendiando uno de ellos. 

También provocaron el vuelco de una motocicleta de la Policía Local y el lanzamiento de piedras y vallas contra efectivos de la Unidad de Intervención Policial (UIP) de la Policía Nacional, que efectuaron disparos al aire para disuadir a la masa, frustrando los planes de los alborotadores.

Precisan que no hubo cargas policiales. Estos altercados provocaron el retraso en la salida de los jugadores y de la directiva del club hasta las 22:00 horas, una hora más del tiempo habitual. 

Tras el pitido del árbitro que marcaba el final del partido, aficionados de corte radical ubicados en la Grada de Animación no abandonaron el graderío y, al menos durante una media hora, estuvieron "incitando a la invasión de campo con reiterados cánticos dirigidos a la masa". 

Antes del encuentro, desde las 17:30 horas, grupos radicales se concentraron en la puerta 8 del estadio por la que acceden los directivos del club y las autoridades, comenzando a increpar con diferentes cánticos a miembros de la entidad local.

Agentes de la Brigada Provincial de Información en Málaga se hicieron cargo de la investigación de los incidentes. Tras arduas averiguaciones, los agentes lograron identificar a los responsables, 13 personas, integrantes de la Grada de Animación, que han resultado detenidos.

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