El Málaga CF está inmerso en un ERE al que lo ha llevado el descenso a Primera RFEF y que afectará alrededor de sesenta trabajadores, según las estimaciones del club. Tres veranos después, el club se ve en la misma situación, ejecutando otro Expediente de Regulación de Empleo para cuadrar las cuentas y ajustar la estructura del club a la nueva realidad a la que se enfrente. Y el ERE no entiende de sentimientos. Volverán a caer nombres ilustres.
Según adelantó SUR, una leyenda del malaguismo, uno de los jugadores más importantes de su historia, el que más veces se ha puesto la camiseta blanquiazul, 313, será incluido en los despidos. Se trata de Sergio Paulo Barbosa, Duda, ahora en la dirección de La Academia y que dejará de formar parte de la entidad malaguista después de muchos años ligados al club.
En este ERE también estará incluido otro miembro ilustre de la familia malaguista como el preparador físico Enrique Ruiz, en el primer equipo desde el año 2005 y desde 1997 en el filial.
Con la salida de Duda se va una leyenda y con la de Enrique Ruiz uno de los hombres que hacía pegamento en el vestuario. Y con alguien que era las dos cosas juntas también acabó el anterior ERE, el que se ejecutó en el verano de 2020 también bajo la administración judicial de José María Muñoz.
En ese proceso tuvo que salir del club el fisioterapeuta Marcelino Torrontegui, uno de los hombres más queridos no ya en el Málaga, sino en el deporte español, especialmente vinculado al ciclismo y al balonmano pero que echó raíces en La Rosaleda cuando llegó en 1999.
La salida de Torrontegui fue un mazazo para muchos malaguistas, sabedores de la importancia en el vestuario de Torron, que había vivido de todo entre las paredes de La Rosaleda.
Ahora le toca a otros dos emblemas, a dos pesos pesados, uno de ellos, el que más veces paseó el escudo por un campo de fútbol. Son tiempos duros.