Un Málaga CF en estado de gracia, con carencias todavía, ha declarado, por fin, el estado de felicidad en La Rosaleda. Delante de más de 19.000 personas goleó 3-0 al Recreativo Granada para sumar la tercera victoria consecutiva, dormir líder virtual de la categoría a falta de que acabe la jornada, la primera portería a cero del curso y encarar la batalla de Linares del próximo domingo con los ánimos por las nubes.
Un Kevin en trance, un Dioni catedrático en el área y un Juan Hernández oportunista, sumados a un Roberto incansable que puso bocabajo La Rosaleda a pesar de no encontrar el premio del gol firmaron la victoria que deja a los blanquiazules con 9 puntos de doce posibles.
Fue un choque de fuerzas muy desigualadas, con un Recreativo Granada demasiado verde para esta Primera RFEF en la que acaba de aterrizar. Timorato en ataque y muy fallón en defensa, regaló un gol y pudieron ser más. El Málaga dejó resuelto el choque en la primera mitad, a pesar de lo peligroso que puede ser un 2-0 para la relajación. A pesar de algún, susto, marcó el tercero en la segunda y pudo llegar alguno más.
De entrada, Pellicer solo apostó por un movimiento en el once. Dani Lorenzo se quedó en el banquillo dejando su sitio en la medular a Sangalli. Juande siguió en el centro de la defensa junto a Nelson Monte y Genaro se quedó con el brazalete de capitán.
El primer susto llegó pronto. Víctor García se complicó en el intento de cederle la pelota a Alfonso Herrero y se la dejó franca en el mano a mano a Ibarrondo que disparó flojo. Fue una ocasión clarísima para el Granada en el minuto 3. Pero a eso respondió Gabilondo metiéndose hasta la cocina y cediéndola atrás, a trompicones, a Sangalli, que remató algo mordida.
Pero el Málaga había salido decidido a ir a por el partido. Y a los 10 minutos Kevin marró un pase para Dioni. Se tiró al suelo, recuperó la pelota, la pisó dentro del área, recortó hacia dentro y disparó mal. Pero Masllorens se interpuso en la trayectoria y la mandó dentro. El partido se le ponía muy pronto de cara a los blanquiazules, empujados por una grada con aspecto de otra categoría. 19.282 espectadores vieron 'in situ' la tercera consecutiva de los suyos.
Siguió llevando el Málaga el peso del partido, aunque con algunas imprecisiones en las entregas. Tras un rato de tregua, Kevin hizo un recorte en tres cuartos de campo del Málaga y se la puso en carrera por encima de la defensa a Roberto que se quedó con ella a trompicones. Paró y se la dio a Dioni. Que con el control, la conducción, la forma de proteger el balón y el disparo que valió el segundo demostró porqué es uno de los jugadores más valiosos de categoría. Segundo tanto en liga para el de la Colonia de Santa Inés. Estalló de nuevo La Rosaleda.
Con poco, el Málaga era muy superior al filial granadino, que se acercaba tímidamente pero es un equipo muy endeble para la categoría. Lo que siguió hasta el 45' no fue un gran Málaga. Pellicer no paraba de gesticular en el banquillo y de corregir a los suyos. Con todo, el partido se podría haber ido finiquitado al descanso si Roberto no se guisa y se come una pelota que robó presionando Van Rinj. Escorado, encaró la portería y disparó al palo. Dos compañeros esperaban el pase atrás que podría haber sido mejor solución.
La segunda parte empezó como terminó. Roberto corriendo a por una pelota en la que solo él creía, lejos del área. Adri López, portero visitante, primero le ganó la partida, pero en la entrega de nuevo estaba ahí el punto cordobés para quedarse con la pelota, que desde lejos disparó con la portería vacía. El balón se estrelló en el palo.
Después de eso, al Málaga le entró algo de modorra. A Pellicer no le gustaba lo que veía sobre el césped y ordenó a Manu Molina y Dani Lorenzo prepararse en la banda. Mientras lo hacía, Larrubia estrelló la pelota en el palo en una buena jugada por la derecha construida por Dioni y Gabilondo. Sangalli y el propio Dioni salieron del campo. El delantero mientras escuchaba corear su nombre. Molina se fue al doble pivote con Genaro y Dani Lorenzo se movía detrás de Roberto.
En el 73' el Recreativo Granada dio un susto serio. Pablo, muchísima clase en sus botas, que tienen veneno, encontró un pase que solo vio él para Griger, que remató cruzado. En el 77' Clavijo empujó el balón a la portería, pero el banderín ya estaba levantado. En eso, se marchó Roberto con La Rosaleda entregada a él, que no tuvo el premio del gol. También se fueron Larrubia y Kevin para que entraran Loren, Juanpe y Juan Hernández. Toda la línea de creación renovada.
El Málaga CF, entre cambio y cambio, había perdido todo el control del partido. Pero Juan Hernández lo solucionó. Bajó con el pecho un balón que venía rebotado de una falta lateral y se sacó un latigazo al fondo de la portería para que los blanquiazules, con esos tres goles de renta, se colocasen líderes. La Rosaleda entera botando.
Los ocho minutos más el descuento sirvieron para que La Rosaleda declarara el estado de felicidad. Ahora, a por la batalla de Linares.