Hay días en los que salen las cosas, se disfrutan y se vuelve a casa con una sonrisa. Este domingo fue uno de esos días y cuando acabó, todo el mundo sabía lo necesario que era esta victoria. Porque sí. El Unicaja venció en el derbi andaluz ante el Coosur Real Betis (96-80) con un juego bonito, sencillo y fácil. Todo fue rodado, prácticamente sin un pero y los días así se disfrutan más. La segunda consecutiva en la competición doméstica. Cómo han cambiado las cosas. 

Nadie destacó por encima de nadie. Todos jugaron llevando al máximo esplendor el significado de la palabra equipo. Qué cosas. Oliver, Brizuela, Francis Alonso, Mooney, Bouteille... todos ellos acabaron con una anotación superior a la decena en un espectáculo ofensivo y también, en muchas ocasiones, defensivo. El Unicaja de Ibon Navarro cada vez carbura mejor. Sus debilidades las oculta con las fortalezas y si las cosas no salen bien, no se empeña en ello, sino que trata de hacer funcionar otros sistemas y formas de juego. 

La de este domingo era una victoria esencial. Más allá de que el equipo no conseguía varios triunfos consecutivos en Liga desde los meses de noviembre-diciembre (San Pablo Burgos, Fuenlabrada y Betis), el equipo ha pasado a respirar con la clasificación. Ya son cuatro las victorias que separan a los dos andaluces y otras dos con el Casademont Zaragoza, aunque los cajistas tienen un partido menos. Además, los resultados de la jornada dominical también ayudaron. Los madrileños perdieron en su partido contra el Real Madrid. 

El Unicaja empezó el partido, como viene siendo costumbre con Ibon Navarro, muy conectado al partido. Y siguiendo con esas costumbres, Alberto Díaz y Darío Brizuela fueron los más entonados. El equipo lo hizo todo fácil (8-2). Generó desde el centro, creó peligro desde las esquinas y abrió la defensa bética para anotar penetraciones sencillas. Todos los titulares anotaron en los primeros minutos, pero el acierto no se extendió al banquillo. Les costó entrar y los visitantes se acercaron con un 16-13. Sin embargo, un tiempo muerto de los cajistas despertó a todos para acabar el primer cuarto con un 21-15. Tan bien acabó todo que incluso salió del partido una pareja comprometida tras los 10 primeros minutos.

El segundo cuarto comenzó incluso mejor. Más allá de lo bonito que pudiera ser el ataque, el despegue en el marcador con una defensa férrea. Sin embargo, el partido ante el Betis confirmó la sociedad ilimitada que están creando Matt Mooney y Cameron Oliver. Los estadounidenses fueron claves en esa máxima ventaja de 14 puntos en el minuto 14 (34-20). Todo lo acertado que no estaban siendo con el tiro, lo estaban reduciendo con la defensa. Los cambios, ahora los titulares, tampoco entraron con la intensidad que habían dejado los anteriores y de ello se aprovechó Vitto Brown para acercar a su equipo a 8. Aunque dos triples de Barreiro y Brizuela cerraron la primera mitad con un resultado de 44-34.

No obstante, todo el ritmo que tuvo el Unicaja en esos 20 minutos lo perdió en el tercer cuarto. El Betis fue superior y lo demostró apretando el marcador con una diferencia de cuatro puntos a mediados del período. La defensa cayó y los tiros, el gran porcentaje liberados, siguieron sin entrar. De lo único que pudo tirar el equipo en esos momentos fue de la pelea en el rebote y de los tiros libres. Más allá de eso, el aro de la canasta parecía totalmente cerrado. Sin embargo, el cerrajero este mediodía tenía el nombre de Darío y el apellido de Brizuela para levantar a su equipo y a la afición. Una canasta tras rebote ofensivo, delante de Pasecniks, y una bandeja en contraataque dieron un respiro (59-51). Más aún cuando Mooney rescató el ataque de sus compañeros y cerró el cuarto con un 73-59.

Dos triples de Francis Alonso y Bouteille ya decantaron por dónde podía ir el partido en su final. Tal fue así que la máxima ventaja ya llegó a cinco minutos del final. Todo lo que no había entrado antes, lo hizo en ese ilusionante final. Todo el mundo disfrutó, todos los jugadores quisieron sumarse a la fiesta y el Martín Carpena se marchó con una sonrisa. Incluso Yannick Nzosa se atrevió a lanzar un triple. Cómo han cambiado las cosas y que sigan así.

FICHA TÉCNICA

UNICAJA CB 96: Alberto Díaz (6), Darío Brizuela (13), Jonathan Barreiro (7), Rubén Guerrero (6) -quinteto titular- Matt Mooney (14), Francis Alonso (14), Axel Bouteille (13), Cameron Oliver (12), Carlos Suárez (-), Yannick Nzosa (0) y Dejan Kravic (2).

COOSUR REAL BETIS 80: Shannon Evans (22), Dairis Bertans (6), Beqa Burjanadze (8), Vitto Brown (17), Anzejs Pasecniks (2) -quinteto titular- Pepe Pozas (0), Aleksandar Cvetkovic (4), Mike Torres (4), Ibrahim Magassa (-), Pablo Almazán (3), Eulis Báez (3) y Jacob Wiley (11).

ÁRBITROS: Carlos Peruga, Raúl Zamorano y Carlos Merino.

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la jornada 26 de la Liga Endesa en el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena ante 5.536 espectadores.

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