El Unicaja de Málaga no ha salido vivo de la batalla de La Laguna, pero casi. El triple de Kalinoski a falta de un segundo se fue al aro y el equipo malagueño cayó 87-86 y perdió el liderato de la ACB, que vuevle a manos del Real Madrid, en la noche de la revancha para Lenovo Tenerife, que terminó con su entrenador paseándose puño en alto por el pabellón cuando sonó la bocina. Los ánimos estaban todavía calientes del domingo con la final de la BCL y el cuadro canario se cobró la factura.
Los de Ibon Navarro sobrevivieron al arreón inicial de los locales, sin Kyle Guy, y en el tercer cuarto le habían dado la vuelta al duelo, aunque no terminó de escaparse. Lo impidió Marcelinho en otra noche en la oficina del brasileño, 22 puntos y 27 de valoración, con el que no pudo una buena versión coral del Unicaja, con Carter como hombre más destacado escoltado por buenos chispazos de Perry. Alberto, en el último minuto con su defensa sobre Huertas le dio la opción al equipo cajista de tener el tiro ganador. Pero el triple de Kalinoski no entró.
El arranque de un Lenovo enrabietado, que antes le había hecho el pasillo de campeón al Unicaja, era previsible y se marcó un 12-2 de salida que obligó a Ibon Navarro a parar el partido a los tres minutos. Tenían mucho guardado. La intensidad bajo los dos aros era tremenda. Barreiro con un triple frenó la embestida y Alberto con robo ayudó a ver la vida de otro color. Tuvo otro tiro de tres Barreiro para el 12-10 pero se quedó en el aro. Pero Lenovo aguantó y estiró de nuevo el tanteo para irse por encima de diez puntos. Lenovo estaba marcando la temperatura del duelo. El 25-9 estaba siendo demoledor con Unicaja fallando y fallando. Djedovic y Kalinoski aliviaron el final del cuarto con dos triples pero las sensaciones eran malas, 26-15.
Y más lo alivió Unicaja en el arranque de la segunda manga para un 29-24 que tuvo que parar Vidorreta. Y funcionó la motivación del técnico vasco. Shermadini cogió las riendas y de nuevo +12 (36-24). Hacía daño en el poste bajo. Y luego fue Fitipaldo el que impidió a Unicaja acercarse. El cabreo de Ibon Navarro era notable. Y entonces Carter asumió responsabilidades, la diferencia bajó a -4 hasta que Vidorreta tiró de nuevo de Shermadini, indefendible. Lo bueno, Unicaja estaba en el partido, había respondido bien a la intensidad canaria y se fue al descanso 47-39 abajo. Lo estaba llevando al límite Lenovo.
Remontada tras el descanso
La segunda mitad empezó también con electricidad, pero esta vez también la ponía Unicaja. Tanto, que se puso por delante por primera vez en el partido con un triple Jonathan Barreiro, con la muñeca caliente. 52-53 y vuelta a empezar. La madera de líder empezó a aparecer en el parqué de La Laguna. Ahora los de Ibon mandaban, corrían y defendían. Marcó la máxima con el 58-64. Carter vivía una noche de inspiración. Pero tuvo respuesta Lenovo igualando. Con la tercera de Carter, en ataque, el pabellón encendido y un 66-67 se acabó el tercer cuarto. La batalla estaba servida.
De hecho, el último cuarto empezó con Unicaja desde el tiro libre por una técnica a Vidorreta. Pero le dio la vuelta Lenovo con 6-0 para el 72-68. Ahora era más consistente Lenovo. Aseguraba los ataques y Unicaja no veía los caminos. Amagaba con irse Lenovo de la mano de Marcelinho, pero ahí estaba Perry para meter de tres. Una falta en ataque de Kalinoski conllevó una técnica a Ibon Navarro. Pero ahora sí se iba Lenovo de seis a falta de 3:20. Macelinho se ponía en 20 puntos con un clínic en el tiro desde media distancia. Ibon se reía con la mesa desde el banquillo. Tenía que ir a estrechar la mano con Vidorreta. Kalinoski cortó un nuevo amago de escapada canaria y Unicaja redujo a un a falta de 1:29. Y la jugada casi le sale a Ibon, que sacó a Alberto para ahoga a Marcelinho. Agotó dos ataques Tenerife y Unicaja tuvo bola para ganar. Faltó valentía y el tiro definitivo se lo jugó desde el triple Kalinoski con Shermadini encimándole. Lo mandó al aro y con el 87-86 definitivo Vidorreta se paseó puño en alto por el pabellón. El líder cayó con honores, dejó de serlo, pero esto todavía no ha acabado.