Siguen las tensiones por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) planteado por Unicaja Banco, que incluye el despido de más de 1.500 trabajadores. La huelga de los empleados contra esta medida ha tenido este viernes un seguimiento mayoritario en localidades de todo el país, que el sindicato Comisiones Obreras (CCOO) ha cifrado en un 93%. Los datos facilitados por CSIF señalan que Andalucía (97%), Valencia (98%) y Barcelona (99%) han sigo los lugares en los que la convocatoria ha tenido mayor éxito.
En Málaga, sede histórica de la entidad financiera, el Ayuntamiento ha aprobado por unanimidad una moción institucional en la que insta a la empresa y sus trabajadores a alcanzar "el mejor acuerdo posible para mantener el mayor empleo posible en nuestra ciudad" y pide que se cumpla el compromiso de que la urbe se mantenga como sede del banco resultante de la fusión con Liberbank.
El alcalde de la ciudad, el popular Francisco de la Torre, ha sido optimista en sus palabras y ha augurado que este asunto "saldrá muy bien", ya que le consta la "voluntad de diálogo" de los sindicatos y del banco: "Yo confío muchísimo en la buena intención y en la capacidad de negociación del actual presidente de Unicaja Banco", ha dicho en el pleno municipal de este viernes, en el que se ha apoyado unánimente la moción.
La votación ha venido precedido de la intervención de la secretaria general de CCOO en Unicaja de Málaga, Rosario Orozco, que ha criticado "la deriva en la que se ha instalado" Unicaja Banco. Su discurso, de apenas unos minutos pero gran pasión, se ha centrado en argumentar que este ERE es solo el primer paso de una deslocalización del banco respecto a su sede histórica.
"Nuestra comunidad no puede permitirse el lujo de perder el centro de decisión financiero y el motor económico que es hoy Unicaja, máxime cuando es uno de los pocos que hay en esta comunidad. Si las instituciones políticas y la sociedad malagueña y andaluza no lo evitan, esa pérdida se va a producir. Ya se está produciendo con el ERE que está sobre la mesa, al que seguirá seguro un proceso de deslocalización de servicios y, por tanto, de decisiones", ha asegurado Orozco, que en las intervenciones políticas posteriores ha recibido mensajes de solidaridad de todas las bancadas.
En su intervención ha contrapuesto las trayectorias de Liberbank, que "cuenta con el dudoso honor de ser la entidad financiera con mayor litigiosidad laboral del sector", y Unicaja, que ha definido como "un referente de solvencia, prudencia y motor económico de esta comunidad".
"Nos enfrentamos a algo que va mucho más allá del ERE, que afecta a la gobernanza de la propia entidad", ha dicho Rosario Orozco, que ha concluido de forma lapidaria: "Somos todos un poco de Unicaja y Unicaja es nuestra".
Todos los partidos han tenido palabras de apoyo para los trabajadores en huelga. El portavoz municipal del PSOE, Dani Pérez, ha asegurado que el ERE es "un ataque a lo que supone el banco de Unicaja en esta provincia y para Andalucía" y ha adjudicado la decisión a un "juego de poderes" que no hace más que "poner en riesgo a los trabajadores".
Desde Ciudadanos, la concejala Noelia Losada ha asegurado desconocer por qué "se está vaciando de competencias a la presidencia (en manos de Unicaja), que está derivando al consejero delegado y, por tanto, a Liberbank": "No estaba prevista la deslocalización, pero se están deslocalizando divisiones estratégicas que estaban en Málaga", ha dicho Losada, que ha recordado que Unicaja es la entidad mayoritaria en la fusión y, por tanto, debería ser "el banco dominante".
Por su parte, la portavoz de la coalición de Podemos e Izquierda Unida, Paqui Macías, ha calificado esta huelga de "histórica" y ha augurado que "no va a ganar la banca", tras lo que ha pedido que la entidad financiera -cuyos beneficios ha calificado de "exagerados" y "desorbitados" se quede en Málaga "pero de verdad, no en un cascarón vacío, sino operando de verdad"