Málaga, esa joya en la costa mediterránea de España, ha dejado de ser tan solo un destino turístico para brillar con fuerza en el mapa de los nómadas digitales y trabajadores a distancia. En el ranking mundial de ciudades para trabajadores remotos de 2023 elaborado por Bloomberg, Málaga ha escalado al puesto número dos, incluso superando a Dubai en calidad de vida. ¿Pero qué es lo que hace que esta ciudad atraiga tanto a aquellos que buscan el perfecto lugar para vivir mientras trabajan?
Silvina Inés Hood es una argentina que llegó a Europa en busca de nuevas oportunidades. Aunque su primer destino fue Cádiz, fue en Málaga donde encontró ese toque mágico que la cautivó.
"Málaga era todo lo que esperaba de Europa y, a la vez, mantenía esa esencia de barrio pequeño", cuenta entusiasmada. Tras tres años en España, Silvina se topó con la ciudad por casualidad mientras ya trabajaba a distancia. Para ella, trabajar en remoto le brinda la libertad de elegir su ciudad, horarios y estilo de vida.
En comparación con Cádiz, Málaga le ofreció una energía completamente diferente. "Aquí hay un espíritu en el aire muy joven y no hablo de edad, sino de vitalidad", comenta. La ciudad, que equilibra el encanto de un pueblo pequeño con las comodidades de una urbe moderna, le brindó la seguridad que no pudo encontrar en su tierra natal, Argentina.
Su plan inicial era quedarse un año y luego decidir si seguir en Málaga, pero el tiempo la convenció de quedarse. Dice que a los dos años de vivir en la ciudad ya se consideró 100% malagueña. Desde entonces, Málaga es su perfecta ciudad, entre las ventajas que encuentra en la ciudad la más importante es que cuenta con un aeropuerto internacional, lo que de vez en cuando le permite hacer escapadas.
Como profesional del marketing y adiestramiento canino, fundadora de OFFside dogs, Silvina enseña a otros emprendedores cómo formar sus propios negocios en el ámbito del adiestramiento canino. Esta argentina dice que nunca habría adivinado que acabaría haciendo lo que hace. Estudió Diseño industrial, aunque le gustaba más la publicidad.
En Argentina no había forma de estudiar publicidad y acabó en marketing para cubrir el puesto en una empresa. “Me imaginaba trabajar en una multinacional, feliz y con un puesto fijo”.
En Málaga tiene lo que buscaba, es feliz. “Desde el momento en el que llegué a Málaga pensé: esto es como un Florida y un Silicon Valley hecho por mamá y papá” comenta. Da igual el enfoque en el que crezca Málaga, será siempre vanguardista, cálida y receptiva, sin perder la esencia de hogar.
Por otra parte, una mexicana también ha encontrado en Málaga su lugar predilecto desde donde trabajar. María Alcántara, a sus 41 años, lleva un año en Málaga desde que llegó en octubre de 2022. Previamente, había vivido en Alemania, de la que dice que la oscuridad le estaba matando. En Málaga había estado antes de visita y dice que el sol característico de la ciudad la llevó a quedarse.
“Desde que llegué a Málaga me ha sido fácil conectar con la ciudad y con la gente”, explica la mexicana a este medio. El estilo de vida de los trabajadores a remoto es muy muy diferente a la norma. La ventaja es vivir desde donde quieras y trabajar desde donde te apetezca. Sin embargo, puede llevar a sentirse sólo, aunque no es su caso.
En Málaga, pese a vivir sola, se siente a gusto, hay mucha gente que la cuida y la aprecia en el día a día cuando camina por las calles de Málaga o cuando pasea por el parque del oeste con su perrita Pimienta.
María, que acostumbraba a cambiar de país cada par de años planea quedarse a vivir en la capital costasoleña y no tener que sufrir más mudanzas internacionales, de esas que “te enseñan que necesitas muy poco para vivir”.
Málaga, en el corazón de esta mexicana, guarda relación con Campeche, la ciudad costera a la que pertenece su familia. En la Costa del Sol se siente en casa. Este, además, es el comentario recurrente de muchos de sus amigos, que están encantados con el clima, el sol y la calidad de vida que la ciudad aporta.
Además, tanto María como Silvina y los miles de personas que teletrabajan desde Málaga tienen la oportunidad de conocerse entre sí en espacios de ‘Coworking’ como The Living Room, donde distintos profesionales de diferentes sectores, se reúnen para compartir un mismo espacio de trabajo en un entorno de oficina.
En estos espacios de coworking es común que haya áreas comunes donde además de trabajar se puede pasar el rato jugando a juegos de mesa o compartiendo experiencias. Además, muchas personas llevan a sus mascotas a trabajar con ellos.
En definitiva, Málaga ha emergido como un luminoso imán para nómadas digitales y trabajadores remotos en busca de una vida equilibrada y enriquecedora. La ciudad les aporta todo lo que buscan, sol y tranquilidad. Es un reflejo de la búsqueda constante de un hogar, una comunidad global unida por la pasión por el trabajo y el deseo de vivir la vida al máximo. Un rincón perfecto para personas que buscan trabajar, crear y prosperar.