El OXO Museo del Videojuego de Málaga está un paso más cerca de poder ver la luz. Este templo para los gamers, que albergará el antiguo Museo Taurino Juan Barco (en la plaza del Siglo), tiene previsto abrir sus puertas para final de año. Concretamente, para el mes de diciembre.
Así lo confirma el presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, en una entrevista concedida a este periódico, de la que ahora se extrae una primera parte. Salado defiende que la capital necesitaba "algo distinto" y adaptado a las nuevas sociedades en materia museística, cuyos valores residen principalmente en la modernidad y en la tecnología. Esta perspectiva entraría a complementar la oferta cultural vigente, que se focaliza principalmente "en las artes y pinturas".
Sin embargo, añade que la materialización de esta inauguración "depende" del suministro de materiales que van a conformar el diseño y la musealización del espacio: "Ya lo hemos visto; no puedo adelantar nada, pero va a ser espectacular", afirma. Uno de los puntos a destacar reside en la originalidad de la galería, sin precedentes en España: "Va a ser uno de los museos dedicados al videojuego más importantes de Europa".
Del mismo modo, acentúa su carácter interactivo y "apto" para distintas generaciones, en el que se plasmará la historia, el presente y el futuro de esta actividad cultural. Con una duración de algo más de hora y media, se pretende que OXO genere contenido propio con charlas y conferencias. Todo ello con "muchos efectos Wow!" (para despertar las emociones) y "dinamizando" el mundo tecnológico y digital: "No va a quedar reducido a piezas expuestas", asegura.
Kaiju, el gigante malagueño
Estos avances vienen a reforzar el mensaje transmitido por el CEO y fundador de Kaiju, Javier Ramos, en una entrevista mantenida con EL ESPAÑOL de Málaga el pasado agosto. En ella, Ramos explicó que "en breves" habría novedades respecto a un "producto único en Europa" sobre el que venían trabajando: "No hay nada igual, ni similar. Es disruptivo, es distinto, tiene muchos puntos diferenciadores. Va a ser un producto único para toda esta oferta cultural de la provincia".
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Cabe recordar que Kaiju, el gigante malagueño del videojuego, fue la empresa adjudicataria de la concesión de este proyecto. El visto bueno de los técnicos, formalizado el 13 de abril, llegó tras varios meses de espera en los que estos impulsores de la convención Gamepolis o la Escuela Superior de Videojuegos y Arte Digital (EVAD) —entre otros— eran los únicos candidatos.
La propuesta de Kaiju busca poner "en valor la industria del videojuego y sus profesionales, así como aportar valor añadido a la oferta de innovación tecnológica, audiovisual, cultural y turística de la provincia", según el informe de valoración de criterios de concesión demanial del espacio.
"La oferta presentada propone interconectar los municipios de la provincia de Málaga a través del videojuego mediante la realización de jornadas, iniciativas formativas y eventos lúdicos en las instalaciones propias del OXO Museo del Videojuego de Málaga como en diversos municipios de la provincia", resume.
La organización de eventos formativos, lúdicos y expositivos (pilares fundamentales en la transferencia de conocimiento y atracción del talento local) otorgan un "valor añadido", ya que aspira a dotar al espacio de "un gran dinamismo y participación de profesionales de la industria".
Hay que recordar que este museo ocupará el lugar del antiguo Museo Taurino, en plaza del Siglo nº2. El valor estimado del contrato es de 87.259,25 euros y tiene un plazo de ejecución de 30 años: 5 años prorrogables por igual período hasta cumplir, incluida la duración inicial de la concesión, el máximo legal permitido de 75 años.
Así, el horizonte del que está llamado a convertirse uno de los hitos claves del año de la consolidación tecnológica de Málaga fija para finales de 2022 la fecha para convertirse en realidad.