El mismo día que atiende a este periódico, Zonox ha recibido el cobro de su primer cliente. Apenas una semana antes, se había coronado campeón de la quinta edición de la competición amistosa entre startups Outstandings. Y apenas llevan unos meses trabajando en su producto, pero está encajando por su propio peso: ajustan automáticamente la tarifa y la compañía eléctrica de sus clientes para lograr alcanzar la tarifa más barata y ajustada a su consumo.

"Ataca un problema muy sencillo: todos pagamos la factura de la luz y queremos ahorrar, pero estamos en una posición en la que tenemos desconocimiento total del sector", explica en una entrevista con EL ESPAÑOL de Málaga el CEO de la compañía, Manuel Palacín: "El consumidor se queda a verlas venir en un mercado del que no tiene por qué tener conocimiento".

Desde su perspectiva, eso suponen "situaciones de abuso y enorme desconfianza", ante las que se quiere erigir Zonox. En su plataforma, "te das de alta, nos das tus datos de consumo y te desinteresas de todo". Ellos monitorizan el mercado y, en cuanto encuentran una tarifa más barata para el uso que se le dé, la cambian sin molestar al usuario.

"Las comercializadoras habitualmente atraen a los consumidores con un precio muy bajo, y luego empiezan a subir. Zonox va saltando por esas tarifas", desarrolla Palacín, que justifica que es una opción posible y poco explotada: "La ley protege al consumidor y dice que, a partir del segundo año de contrato, se puede cambiar sin problema. El primer año te pueden penalizar como máximo un 5%. Como mínimo, se recomienda cambiar de compañía una vez al año, pero se puede optimizar con más frecuencia".

Además, ajustan la potencia y hacen el cálculo óptimo si, por ejemplo, cuentas con un tejado que capta energía solar. "Nos integramos con las bases de datos de todas las distribuidoreas de España, y no a todos los clientes les conviene la misma tarifa. En el análisis exhaustivo de los datos es donde está el valor. De media, podemos ahorrar un 30% al año", concreta.

Junto con Palacín, trabaja a tiempo completo en Zonox su jefe de tecnología o CTO, Íñigo Flores. Aunque solo llevan dos meses trabajando sobre la idea actual, su formación como equipo se produjo hace seis meses dentro de la que luego sería la última promoción de la incubadora Demium en Málaga.

Su primer enfoque fue en torno a las comunidades solares y las posibilidades de autoconsumo colectivo a distancia, pero se percataron de que "estos y muchos otros cambios que vienen en el sector de las renovables todavía no son rentables".

"Esta mañana nos ha pagado nuestro primer cliente, y ya tenemos lista de espera. Nos faltan manos por todos lados. Solo entre los amigos, la familia y demás que pagan mucho de electricidad, no damos abasto ahora mismo. Primero, queremos gestionar de una forma muy personalizada; para luego entender qué nos vamos a encontrar a la hora de automatizar. Una vez el producto ya está pulido, ya lo escalamos", plantea Manuel Palacín.

Quieren medir "cuánto se necesita para adquirir un cliente y ajustar las necesidades financieras" antes de ponerse a buscar financiación. Y así van creciendo en una Málaga tecnológica en la que han encontrado "muchísima ayuda" de entidades como la comunidad de emprendedores Málaga Tech o el programa autonómico Andalucía Emprende "desde el principio".