Si la tecnología ya lo está cambiando (casi) todo en nuestro día a día, ¿cabría también una reinvención de los villancicos populares? ¿Y si los Reyes Magos, en vez de ir caminito de Belén como reza la canción, pudieran ir también al metaverso? Bromas aparte, la startup malagueña Beemeral se ha propuesto demostrar, al menos, que los tradicionales belenes que representan mediante figuras el nacimiento del niño Jesús en el portal también tienen hueco en el mundo virtual inmersivo.
La compañía ha dejado la experiencia abierta hasta este mismo viernes en la Incubadora de Alta Tecnología (IAT) en Metaverso del Polo Digital, donde tienen su espacio de trabajo. Te pones las gafas de realidad virtual y la experiencia te sitúa en una recreación digital de ese mismo lugar, pero en la que tienes ante ti un gran árbol de Navidad y un tablero con varias figuritas (María, José, Melchor, Gaspar, Baltasar, el ángel...) que puedes coger y colocar para configurar tu propia representación del nacimiento. La inmersión se completa cogiendo una cámara fotográfica -también virtual, claro- y tomando una fotografía de tu creación. La que realizó este periodista es la que encabeza el artículo.
"A nosotros cada cierto tiempo nos gusta hacer algo para enseñar de forma clara qué es el 3D", explica en conversación con EL ESPAÑOL de Málaga el CEO de Beemeral, Francisco Calderón, que señala su recreación de la Catedral o una experiencia conmemorativa del general liberal José María Torrijos como ejemplos similares. La empresa está pivotando en este momento "de una herramienta que hace 3D a un software que optimiza la forma en la que se hace 3D" y esta experiencia navideña les sirve como escaparate: "Cuando le enseñamos a alguien el belén, le estamos diciendo lo que somos capaces de hacer. Sin nuestro software, hubiéramos tardado el triple. Pero también es para que la gente se divierta y poner un poco de color a la Navidad".
La idea parte de una unión sencilla pero inédita de conceptos: si somos españoles, es Navidad y trabajamos en realidad virtual, ¿por qué no batirlo todo en una única experiencia? "No hemos encontrado ningún otro belén en realidad virtual. Hay muchas cosas navideñas muy modernas, pero no hay nada con esa tradición", relata Calderón. Desde sus inicios, cuando se propusieron crear un metaverso histórico de Málaga, esa conjunción entre el pasado y el futuro ha estado muy presente en los planteamientos de Beemeral.
"Nosotros venimos de unos tres años trabajando en 3D juntos a tope y no hemos tardado tan poco (unas dos semanas) en hacer algo así nunca. Empezamos en el sector de forma muy manual y lo hemos ido automatizando; y ahora hemos encontrado la forma de resolver un problema grave", plantea el CEO de Beemeral: "Muchas veces se presupuesta mal y tienes que acabar echando muchas más horas. Eso es algo que nosotros queremos cambiar".
Su nuevo enfoque va justamente en esa línea: "De cada cinco horas que dedicas a un proyecto en 3D; tres estás creando y dos estás arreglando lo que has creado. Cada modelo tiene unas cien mil caras y cada una de ellas te puede explotar por mil motivos", señala Francisco Calderón. El software en el que están trabajando pretende servir de una especie de corrector automático de esa gran cantidad de factores que pueden salir mal en cada una de las dimensiones posibles, lo que supondría una importante optimización de los tiempos de dedicación a esa creación 3D.
La idea es que ese software también recoja datos de los hábitos de los modeladores 3D y pueda predecir futuros flujos de trabajo, además de su duración. "Tenemos un problema que es mucho más grave que crear 3D, y es que la gente que está creando ese 3D llega mal a todo y le cuesta la salud", analiza Calderón, que espera que su nuevo proyecto ayude a corregir ese desajuste en los equipos creativos. Y en la propia experiencia del belén virtual inmersivo, ya aparece una fecha de lanzamiento de ese software de Beemeral: 6 de febrero.
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