Los altos precios de la factura energética y la necesidad de un cambio de modelo por el cambio climático sigue creando oportunidades para el sector tecnológico de Málaga. Ya no solo a la hora de automatizar la instalación de placas fotovoltaicas y otras fuentes de energía renovables, sino también para directamente optimizar su consumo y el de todos los demás activos de una compañía.

El CEO de Bettergy, Antonio J. Ruiz, explica en una entrevista con EL ESPAÑOL de Málaga que su empresa se dedica a reducir el coste de energía tanto en clientes de tipo privado como en organizaciones de tipo público, a través de la digitalización de datos y el desarrollo de herramientas digitales. "La base para todo es medir, es decir, el digitalizar datos. Si tú al final no mides, no sabes cómo hacer las cosas", ha indicado Ruiz.

A través de su plataforma, Bettergy ofrece a sus clientes una herramienta digital que permite medir el consumo de energía de manera precisa, facilitando la identificación de oportunidades de ahorro y la implementación de recomendaciones personalizadas para mejorar la eficiencia energética. Y todo ello, creciendo a pulmón desde el Málaga TechPark.

Ruiz ha compartido su visión sobre el futuro de la energía, enfocándose en la capacidad de control digital sobre los activos instalados para optimizar su rendimiento. "El futuro de la energía va por ahí. No es solamente instalar, sino tener capacidad de control digital sobre los activos que instalas para optimizarlos", ha manifestado Ruiz. Para él, esa es la diferenciación de Bettergy en el mercado gracias a su enfoque en la tecnología y la ejecución de proyectos de eficiencia energética.

"Nosotros tenemos la I+A y la innovación muy interiorizada, sobre todo a nivel de software", explica. Esa capacidad para adaptarse les ha hecho estar bien situados para aprovechar los cambios legislativos. "Ha entrado en vigor una normativa a nivel nacional que, básicamente, lo que va a ocurrir es que te paguen por el ahorro que tú consigas", ha explicado Ruiz.

Esta legislación —según explica el CEO de Bettergy— establece que tanto individuos como empresas y organizaciones públicas recibirán una compensación económica por cada kilovatio de energía que logren ahorrar, introduciendo un modelo de incentivos directos para la promoción de prácticas de consumo energético más sostenibles.

El concepto detrás de esta normativa, conocido como certificado blanco o certificado de ahorro energético, representa una revolución en el sector, según palabras de Ruiz. "Si tú ahorras un kilovatio, te van a pagar diez céntimos", ha señalado. De acuerdo con su CEO, Bettergy se encuentra entre las pocas empresas en España con la capacidad técnica y legal para implementar soluciones que se alinean con esta nueva regulación, posicionándose así como un actor clave en el mercado energético del país.

Además de su enfoque en la eficiencia energética, Bettergy también se dedica a la instalación de sistemas de energía solar, aunque su principal valor añadido reside en su capacidad para ofrecer soluciones integrales que combinan la generación de energía renovable con la optimización del consumo energético. "Lo que hacemos es medir datos de consumo y a partir de ahí definir una serie de recomendaciones y actuar sobre esas recomendaciones", ha explicado Ruiz.

Ronda de 2 millones

Bettergy se encuentra en un momento crucial de expansión y está en busca de una inversión significativa para acelerar su crecimiento. "Estamos buscando en torno a los dos millones de euros", ha indicado Ruiz, destacando que este capital permitirá a Bettergy escalar sus operaciones y reforzar su posición en el mercado de la eficiencia energética. La compañía, que ha crecido hasta ahora mediante bootstrapping, ve esta ronda de financiación como un paso esencial para alcanzar sus ambiciosos objetivos a corto y medio plazo.

Ruiz ha compartido que el objetivo de Bettergy para 2024 es alcanzar una facturación de diez millones de euros, lo que representa un salto significativo en la trayectoria empresarial de una empres que define como "prudente". "La valoración de la que partimos es alta, porque por diferentes motivos sí que nos interesa buscar un socio industrial o capital riesgo", ha afirmado.

Además, Ruiz ha enfatizado la necesidad de crecer no solo en términos financieros, sino también en capacidad operativa y talento humano. "Somos unas 40 personas y la empresa tiene que crecer", ha señalado, reconociendo los desafíos que implica la gestión de recursos humanos y la importancia de atraer y retener talento en una fase de expansión acelerada.

Málaga

Antonio J. Ruiz también ha expresado su preocupación por el ecosistema tecnológico y empresarial en Málaga, destacando la necesidad de un cambio de enfoque hacia el apoyo a las empresas locales. "Necesitamos mucha más masa crítica de empresas malagueñas, que paguen impuestos aquí", ha señalado Ruiz. Además, ha criticado la tendencia de invertir en el sector inmobiliario, lo que considera un obstáculo para el crecimiento sostenible de Málaga: "El problema es que siempre estamos en lo mismo: el inmobiliario, el inmobiliario, el inmobiliario".

"Yo lo que he visto en Málaga es que no hay ecosistema financiero", ha afirmado sobre la falta de un sistema de apoyo robusto para startups y empresas tecnológicas en la región. Desde su perspectiva, la llegada de inversores interesados en el sector tecnológico en lugar del inmobiliario sería "sin duda una buena noticia".

Su llamado a la acción pasa por cambiar la visión predominante en Málaga hacia una que valore y fomente el desarrollo industrial y tecnológico. "Hay que promocionar lo local. Hay que fomentar las empresas locales. Y hacer que esas empresas pasen de 10 a 100, de 50 a 500 y de 100 a 1000", ha declarado, instando a un cambio de mentalidad que priorice la creación de un entorno propicio para el desarrollo de empresas tecnológicas: "El marketing tenemos en la ciudad es muy bueno, pero luego rascas un poquito y los datos de salario medio y de PIB son evidentes", ha concluido.