Durante casi año y medio, el Ayuntamiento de Málaga permitió a los hosteleros de la capital ampliar sustancialmente la superficie de sus terrazas en la vía pública. La medida buscaba minimizar el grave impacto que la crisis generada por la Covid estaba causando sobre estos negocios.
Pero esta carta blanca quedó suspendida en el momento mismo en que la Junta de Andalucía levantó todas las restricciones en materia de consumo y ocupación que afectaban a este sector.
De ello pasa ahora poco más de un mes. Un intervalo de tiempo en el que el área de Comercio, con la colaboración de la Policía Local, ha redoblado los esfuerzos de inspección. El objetivo es claro: comprobar que los mismos empresarios que se beneficiaron esos 18 meses de tener más mesas y sillas de las autorizadas, revierten la situación y readaptan sus aprovechamientos a los permisos originales.
Aunque la gran mayoría de hosteleros acata la decisión municipal, aún se cuentan por decenas los que incumplen de manera flagrante. Muestra de la vuelta de tuerca dada por el Consistorio es que desde que se suspendió el decreto son 55 las órdenes de retirada tramitadas contra locales por excesos en la ocupación o, directamente, que han seguido explotándolas pese a carecer de autorización para ello.
Aunque sin un detalle exacto de la ubicación de estos establecimientos, la concejala de Comercio, Elisa Pérez de Siles, ha apuntado que la mayor parte de los casos se reparten entre Centro, Teatinos y Carretera de Cádiz.
La incoación de estos expedientes, la mayor parte ya notificados a sus responsables, sienta las bases a que desde el Ayuntamiento se pueda impulsar la retirada del mobiliario, lo que vendría acompañado de las correspondientes sanciones económicas. E incluso de la revocación de las autorizaciones.
"Entendemos que el hecho de recuperar los aforos posibilita que ahora trabajemos para devolver las ocupaciones a la normalidad, para hacer más compatible la convivencia de las terrazas, con el uso normal de la vía pública", defiende la edil, que ha admitido que en todos estos meses se ha otorgado prioridad a la recuperación económica de los negocios afectados.
En este sentido, incluso, tiene palabras de agradecimiento por la "empatía" con la que han respondido la mayoría de vecinos, "tolerando de buen grado las ocupaciones ampliadas". "Pero hay situaciones sobre las que hay que profundizar en cuanto a vigilancia porque son intolerables: terrazas no autorizadas, excesos de ocupación reiterados…", ha sentenciado.
Desde su punto de vista, la "preocupación" que tiene el Ejecutivo local viene a coincidir con la del propio sector empresarial. Hay que recordar que el propio presidente de Mahos, Javier Frutos, ya expresó en una entrevista a EL ESPAÑOL de Málaga su aval a que se actúe contra aquellos que incumplen las normativas.
"Mi sensación es que la mayoría cumple, pero también le digo que el que no lo haga, que sea sancionado. Nosotros no vamos a defender a nadie que incumpla. Defenderemos cuando creamos que haya una injusticia en el sector", dijo.
A los datos del último mes pueden sumarse los de todo el año. Según la información disponible, desde enero se han levantado 690 actas por exceso de ocupación, a los que añadir 179 apercibimientos por incumplir la ordenanza. De éstos últimos, 51 en el Centro, 12 en Teatinos y 116 en el resto de la ciudad. En cuanto a las actas enviadas a Gestrisam por "incumplimientos graves y muy graves", son 131.