Málaga

La escultura dedicada en Málaga a la figura de Salomón Ibn Gabirol, uno de los grandes pensadores árabes, cambia definitivamente de sitio. Y lo hace para ganar visibilidad. O al menos ese es el objetivo de la maniobra que a primera hora de la mañana de este jueves ha realizado la Gerencia de Urbanismo de la capital.

Tras años compartiendo y casi compitiendo por el espacio en el que se encontraba con la terraza de un conocido restaurante del Centro histórico, El Pimpi, ahora, Ibn Gabirol, tiene más aire a su alrededor, adquiriendo protagonismo en el entorno de la calle Alcazabilla, por la que a diario transitan cientos de personas.

"Era un compromiso que teníamos con la comunidad judía; el objetivo era realizar el traslado dentro de este año, en el que se celebra el milenario de su nacimiento", ha explicado el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López.

El propio edil reconoce que era necesario "buscarle otra localización para que no estuviese tan oculto". Después de analizar varias opciones, como la plaza que hay junto a la calle Granada, donde se proyecta un centro cultural sefardí, "parecía que era más importante que estuviese en un sitio donde la gente lo vea". 

Tras analizar la cuestión con la comunidad judía, se ha optado por ubicarlo mirando a La Alcazaba y al Teatro Romano, dos de los grandes iconos del patrimonio histórico de Málaga capital. "A Alcazabilla va mucha gente y es importante que vea la escultura y conozca una figura suficientemente relevante", ha añadido López.

La importancia de Ibn Gabirol queda demostrada en que se trató de uno de los pensadores andalusíes que forjó el primer Renacimiento en Europa. La escultura fue realizada en los años 70 por el artista norteamericano Hamilton Reed Armstrong. La misma representa al filósofo y poeta en actitud de recogimiento, absorto en sus pensamientos. 

Inicialmente, presidió los jardines situados a la trasera del Museo Picasso, pero la apertura de la pinacoteca dedicada al universal artista malagueño hizo que el entorno fuese remodelado y que la escultura dejase la peana en la que estaba asentado. Tras la reclamación de varios colectivos vecinales de la zona Centro, el pedestal fue restituido, aunque desplazado junto a la terraza de un bar.

Plantarán un granado

Al movimiento de la escultura hay que sumar otra iniciativa acordada por la concejala de Cultura, Noelia Losada, y la concejala de Sostenibilidad, Gemma del Corral, y que va a consistir en la plantación de un granado junto a la imagen. Un árbol "tan simbólico de la cultura hebrea usando además una tierra especial", ha indicado Losada por medio de sus redes sociales.

La también portavoz de Ciudadanos en el Consistorio ha mostrado su satisfacción por "haber convencido" a Urbanismo de que moviera la estatua, atendiendo la reclamación de la comisión de expertos creada para el aniversario.

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