Málaga

El incremento desorbitado que están sufriendo en los últimos meses los precios de las principales materias primas de la construcción ya se deja notar en uno de los proyectos del Ayuntamiento de Málaga. La Empresa Malagueña de Transportes ha tenido que volver a licitar la contratación del desvío de un colector situado en los terrenos sobre los que se proyecta sus nuevas cocheras incrementando casi un 43% el precio de partida.

De una inversión inicial de 319.244,52 euros (sin IVA), conforme a la primera de las convocatorias, publicada en la Plataforma de Contratación del Estado el pasado 9 de marzo, se ha pasado a 456.096,49 euros (sin IVA) apenas unos días después.

De hecho, antes de que fuese activada la nueva licitación en la web estatal, se recogía una diligencia firmada por el gerente de la EMT, Miguel Ruiz, informando de la suspensión temporal del concurso original tras haber "detectado que los precios de determinadas partidas empleadas para la elaboración del presupuesto base de licitación son muy inferiores a los precios actuales de mercado". 

Más allá de la variación de los valores económicos, con la que el organismo municipal pretende evitar que la actuación quede desierta, también se modifica el plazo de presentación de ofertas. El mismo expira el próximo 31 de marzo.

El proyecto de las cocheras de la EMT ya cuenta con la aprobación inicial del estudio de detalle mediante el que se ordenan los terrenos, situados junto al Auditorio de Cortijo de Torres.

La previsión es que las mismas tengan cabida para 100 autobuses eléctricos, disponiendo de 20 puntos de recarga. De hecho, la previsión es que las instalaciones cuenten con capacidad para 379 autobuses y 189 aparcamientos bajo rasante. El techo edificable asignado a los terrenos es de 13.495 metros cuadrados sobre rasante y otros 8.917,71 metros bajo rasante.

La construcción de estas edificaciones es clave en la estrategia municipal de reducir de manera drástica el vehículo privado en la ciudad y apostar por otros medios alternativos, caso de los modos eléctricos. La convicción de la EMT es que antes de 2035 toda la flota de autobuses urbanos pase a ser eléctrica. La flota actual de la sociedad está integrada por unos 300 vehículos, de los cuales ya hay 25 híbridos eléctricos y está prevista la compra de 10 totalmente eléctricos en 2022. 

Otra de las mejoras a introducir es la de instalar 23.580 metros cuadrados de placas fotovoltaicas, que quedarán situadas sobre las pérgolas que cubrirán las 257 plazas de los vehículos de 12 metros de largo, así como las 122 para los de 18 metros. Serán en total 6.200 módulos, con una potencia estimada de 4.774 MWh/año.

Además del parque solar y de las dársenas para autobuses, el plan incluye varias áreas funcionales. Una de ellas, la de talleres, con un desarrollo de 7.564,36 metros cuadrados de techo; otra es la de instalaciones técnicas auxiliares, con 2.160,63 metros de techo, y la tercera, de uso administrativo y servicios, con 3.770 metros.

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