La apuesta de Málaga por el turismo de yates tiene una fecha clave en el horizonte: mediados de julio. Esa es la fecha que, según ha confirmado el presidente del Puerto, Carlos Rubio, se maneja para la inauguración oficial de la marina de megayates construida en el muelle 1 y esquina con el muelle 2. Esta infraestructura, en la que se han invertido unos 11 millones de euros, es explotada por el mayor operador mundial de este tipo de instalaciones, Ygi Marinas, y Ocean Capital Partnes.
Ambas firmas, junto al empresario malagueño Domingo de Torres, están finalizando los últimos detalles en los trabajos de adecuación de la zona. Un proceso en el que es clave la instalación necesaria para garantizar el suministro eléctrico a los grandes buques que atracarán en los 31 amarres dispuestos.
Sobre este particular, hay que recordar que la Gerencia de Urbanismo de Málaga adjudicó meses atrás la licencia para avanzar en una primera fase del trazado necesario para llevar la línea hasta la marina. Pero a esta hay que sumar otra etapa que estaba pendiente del informe de la Dirección General de Costas.
Pese a ello, Rubio ha asegurado que las embarcaciones van a disponer de electricidad desde el primer momento. Aunque para ello va a ser el propio Puerto el que se encargue de facilitar el suministro. Una acción que, recalca el mandatario, tiene carácter "provisional".
La fijación de una inauguración oficial se produce después de que a principios de este mes de mayo atracaron en esta infraestructura los dos primeros buques. El Azimut Grande 35 Metri, con capacidad para 10 invitados, tuvo el honor de ser el primero. Y a este se le sumó un catamarán de más de 20 metros.
Las dos escalas tuvieron, no obstante, un valor más simbólico que material. Los 31 puestos de amarre que ofrece esta instalación van a permitir la llegada de embarcaciones de esloras comprendidas entre 30 y 180 metros.
Los números económicos que rodean la intervención son elevados. Las estimaciones apuntan a que serán capaces de generar un impacto anual superior a los 100 millones de euros en la ciudad, así como favorecer la creación de más de 800 puestos de trabajo sumando los empleos directos, indirectos e inducidos.
El proyecto reserva dos plazas para embarcaciones de 100 metros de eslora o más; a las mismas hay que agregar dos para naves de 72 metros; tres de 60 metros; ocho de 50; nueve de 40, y siete de 30 metros de eslora. El reparto situará los barcos de mayor tamaño en el muelle 1.
Las superficies a gestionar por la concesionaria incluyen 41.484 metros cuadrados de lámina de agua, con la correspondiente superficie de tierra de 4.830 metros cuadrados. En conjunto, abarca una longitud de muelle de 770 metros.
Pero también asume el derecho de explotar el edificio situado en la parte más al sur del Paseo de la Farola, junto a la rotonda, con una superficie de 317 metros cuadrados, así como de dos parcelas anexas, una de ellas de 153,31 metros cuadrados (al este) y otra de 274,96 metros cuadrados (al oeste). Ambos dedicados a labores de recepción, registro, servicios generales, torre de control, cafetería o tienda.