La subasta de las tres torres de Málaga en los antiguos suelos de Repsol vuelve a quedar paralizada. Al menos temporalmente. La mesa de contratación ha comunicado a los licitadores su decisión de posponer la apertura del sobre económico y dar a conocer la valoración técnica ante la existencia de un recursos judicial por parte del colectivo Bosque Urbano contra la venta de los terrenos.
A priori, esta suspensión queda pospuesta a la espera al menos de que la Gerencia de Urbanismo se persone en el procedimiento judicial, un paso que, según el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, se va a dar de inmediato. El plazo máximo cumple este viernes.
Casi una hora después del inicio de la mesa, los responsables de la misma han comunicado a los representantes de las promotoras que pujan por estos aprovechamientos, Urbania, Acciona, el fondo suizo Stoneweg, Exxacon y Single Home la determinación adoptada.
Lo sucedido supone un nuevo revés en los planes municipales de hacer caja con la enajenación de estas parcelas, sobre las que se proyectan, entre otras, tres edificaciones de 28, 30 y 32 alturas. Hay que recordar que la puesta en conocimiento de las valoraciones técnicas y de las ofertas económicas ya fue pospuesta semanas atrás ante los reparos de la Intervención municipal. En ese caso, porque consideraba que faltaban aspectos a justificar en las propuestas de las empresas.
Y, en la misma medida, lo ocurrido puede interpretarse como una victoria de Bosque Urbano en su pugna por la anulación del proyecto residencial y terciario. Desde hace años, este movimiento social y ciudadano reclama que la totalidad del sector, con unos 177.000 metros cuadrados, sea reservado a zona verde. Un modelo que choca con el defendido por el equipo de gobierno.
"No hay ninguna irregularidad, nosotros nos vamos a posicionar en contra de ese pleito y vamos a contestar", ha explicado López. Para el edil, se opta por actuar con "cautela" y se ha informado a los licitadores de la situación. Y ha insistido en que lo ocurrido "no tiene que ver con la enajenación de las parcelas, sino con el planeamiento o porque quieren que el parque sea más grande".
Criterios de valoración
Aunque los criterios de valoración de las ofertas toman como principal factor el económico, con un máximo de 65 puntos, la Gerencia de Urbanismo ha querido ponderar el valor de las propuestas arquitectónicas, con 35 puntos.
En este sentido, apuesta porque Repsol se convierta en una referencia desde el punto de vista de diseño. Es por ello por lo que, según marca el pliego de condiciones, se reservan 20 puntos para el diseño global del proyecto, al tiempo que se busca premiar la categoría del equipo redactor del anteproyecto de los edificios.
Muestra de ello es que se valora con un máximo de 9 puntos a las ofertas que cuenten con equipos técnicos que hayan sido galardonados con el Premio Pritzker, la Medalla de Oro del Riba, la Medalla de Oro del AIA, el Premio Driehaus, el Premio de Arquitectura Contemporánea de la UE o los Premios Mies van der Rohe, Alvar Aalto, el Aha Khan de Arquitectura, el Akaa…
En el caso de las parcelas de uso terciario, el Ayuntamiento pretende que los ofertantes apuesten por reservar buena parte de los inmuebles para uso de oficinas. Por ello, se otorga una puntuación añadida a los promotores que garanticen ese destino "en al menos 3 de las 4 plantas de los edificios". Y se precisa que este uso debe mantenerse como mínimo 10 años.