Las reglas del juego con las que el Ayuntamiento de Málaga activó las bolsas públicas para contratar de manera temporal a los operarios que cubrirán las necesidades de su empresa de limpieza, cambian radicalmente. 

Pese a que el periodo de recepción de solicitudes sigue abierto (finaliza este viernes), el procedimiento de selección queda descafeinado después de saberse que la empresa municipal dará prioridad a los empleados que forman parte de la antigua bolsa procedente de la extinta Limasa. 

Los alrededor de 200 integrantes de la misma, según datos de la concejala de Limpieza, Teresa Porras, sin necesidad de participar en la criba ahora en marcha, tendrán preferencia a la hora de ser asignados a las tareas de refuerzo previstas en Semana Santa, Feria y verano. Y ello incluso por delante de los aspirantes a las bolsas públicas que mejor valoración y puntuación tengan. 

Así lo ha confirmado Porras, quien viene a justificar la decisión adoptada esta misma semana. "Es gente que lleva 15 y 20 años, a la que se llama para la Semana Santa y la Feria; lo que no es normal es que ahora lleguen otros y les adelanten; lo lógico es ordenar la bolsa", ha esgrimido, confirmando que se ha salvado "el último escollo que quedaba".

"Es gente que lleva 15 y 20 años, a la que se llama para Semana Santa y Feria; lo que no es normal es que ahora lleguen otros y les adelanten"

Teresa Porras, concejala de Limpieza de Málaga

La inclusión de este nuevo elemento se produce después de que, según fuentes consultadas, los integrantes de la antigua bolsa de Limasa mostrasen su malestar por la decisión del Ejecutivo local de abrir las bolsas públicas. 

"Los nuevos siempre van a estar por detrás de los de la antigua bolsa", vienen a resumir las fuentes, que añaden que lo que se está propiciando es la configuración de "una nueva bolsa pero con los de siempre". 

Este movimiento puede ser interpretado como una nueva cesión ante la plantilla, cuestionando la naturaleza misma con la que el alcalde, Francisco de la Torre, tomó la decisión de municipalizar el servicio de limpieza y de recogida de basuras. Y no es la primera vez en los casi dos años de historia de Limasam.

Pese a la voluntad del regidor por habilitar un mecanismo mediante el que contratar personal por medio de un procedimiento público, a finales del año pasado, la entidad optó por un procedimiento restringido para seleccionar a 220 trabajadores como fijos discontinuos para sábados, domingos y festivos (147) y para reforzar los turnos en los sábados (73). La selección final se hizo exclusivamente con los integrantes de la antigua bolsa de Limasa,

Una vez conocido el acuerdo que otorga preferencia a los antiguos operarios de Limasa, según las fuentes, ya hay peticiones de solicitantes a la convocatoria de las nuevas bolsas que han pedido a la empresa la devolución de los 15 euros abonados en concepto de tasas.

El plazo formal quedó activado el 1 de julio pasado. El objetivo era configurar dos bolsas integradas por un máximo de 150 puestos de conductores y 375 de operarios de limpieza. Los solicitantes deben cumplir unas mínimas exigencias como tener el graduado escolar o similar. 

Proceso de las nuevas bolsas

Una vez cerrado el periodo de presentación de candidaturas, Limasam activará un proceso de autobaremación de méritos, con el objeto de reducir de manera drástica el número de peticionarios. Para el caso de los conductores, tras la baremación, serán seleccionados los 300 con mejor puntuación. Todos pasarán a la segunda fase, que consistirá en una prueba teórica y otra práctica.

En este caso concreto, los aspirantes al puesto de conductor tienen que contar con el carné C y CAP en vigor. Asimismo, se puntuará la experiencia en el sector, a razón de 0,08 puntos por día trabajado en una empresa relacionada con la limpieza en un puesto similar al planteado. 

Para la bolsa de operarios de limpieza, serán seleccionados 600 candidatos, ordenados de mayor o menor puntuación. La experiencia será tasada a razón de 0,06 puntos por día cotizado en una empresa de la misma naturaleza.

Para las dos categorías de puestos a cubrir habrá una prueba teórica con 30 preguntas tipo test, penalizándose las respuestas incorrectas. Las preguntas versarán sobre el conocimiento del candidato acerca de las operaciones propias a realizar, relativas a la prevención de riesgos laborales, al código de circulación y el temario propio del CAP, así como del callejero municipal de Málaga.