El futuro de los suelos de la antigua Siemens en Málaga empieza a moverse. Tras años sin uso productivo, después de que la empresa desplazase su centro de trabajo al Parque Tecnológico de Andalucía (PTA), la parcela está despertando el interés creciente de un buen número de empresas dispuestas a activar su desarrollo urbanístico.
Así lo ha confirmado el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, quien subraya el "interés significativo" que hay en torno a un sector que cuenta con una situación "estratégica de ciudad". Sin embargo, por lo que señala, la pretensión de muchos de estos grupos no coincide necesariamente con la actual clasificación del suelo, que está recogido en el Plan General de Ordenación Urbanística como productivo-empresarial.
"Todo el mundo lo que quiere es hacer otra cosa; nos preguntan y les decimos que sí que se puede hacer otra cosa, pero que eso implica una modificación del planeamiento", precisa, al tiempo que defiende que se respete la apuesta municipal para el futuro de EPCOS quede vinculado al Palacio de Ferias, situado al otro extremo. Ambos espacios están separados por la ronda oeste.
Atendiendo a la ficha recogida en el PGOU, sobre los 34.500 metros cuadrados de superficie se autoriza un techo edificable máximo de 44.850 metros cuadrados de uso productivo-empresarial. Y justamente aquí radica un posible escollo. "Es un desarrollo demasiado grande para cualquier inversor; la gente ha querido hacer otras cosas que no sean oficinas", explican fuentes consultadas, que elevan a unos 25 millones de euros el valor de compra.
Pero más allá de los parámetros objetivos, es relevante el posicionamiento de los autores del planeamiento, que abogan por impulsar "una reestructuración destinada a consolidar un área empresarial compatible con usos comerciales en planta baja, complementando las sinergias creadas con el Palacio de Congresos y Exposiciones".
Todo ello por medio de "arquitecturas de calidad como reclamo de la singularidad del uso y del lugar de transición entre la ciudad residencial y empresarial, con vocación de convertirse en un área local de centralidad para el uso terciario de oficinas y otros usos complementarios a las necesidades urbanas y las que devienen de la actividades que se realizan en el Palacio".
Para conformar la operación, se habla de la necesidad de tramitar un plan especial mediante el que definir una parcela dotacional junto al nudo de la Avenida de Ortega y Gasset, fijándose entre los usos compatibles el hotelero, y autorizándose una edificación de "altura excepcional" en la parcela más cercana a la ronda de circunvalación, que podría alcanzar las 19 plantas.
Otra particularidad de lo recogido en la ficha es que se menciona como carga externa la mejora de la conexión peatonal con el Palacio de Exposiciones y Congresos, "a través de una estructura exenta sobre la autovía o, en su caso, ampliando mediante pasarela en ménsula el puente existente o cualquier otra que deberá aprobar la DG de Carreteras".
Estos terrenos forman parte del catálogo de suelos de uso terciario elaborado por la Gerencia de Urbanismo hace un par de años en el intento de atraer a inversores interesados en sus desarrollos. Un documento que incorpora una veintena de sectores repartidos por toda la ciudad con una superficie cercana a los 4,3 millones de metros cuadrados, con un techo próximo a los 900.000 euros.
Noticias relacionadas
- El salto definitivo de Málaga: "Está en boca de todos los inversores, todos quieren estar aquí"
- El riesgo inmobiliario de Málaga: necesita 5.000 viviendas nuevas al año y 50.000 metros de oficinas ya
- El versátil Palacio de Ferias que desea Málaga: auditorio con 15.000 personas de pie y pabellón para 5.000