La larga travesía por la que desde hace casi 15 años viene transitando la gran operación urbanística de La Térmica, una de las últimas parcelas del litoral oeste de Málaga, toca a su fin. La decisión de la Dirección General de Costas de levantar sus reparos al proyecto, debido al "efecto pantalla" causado por sus edificaciones, va a permitir al Consistorio dar el siguiente paso y aprobar definitivamente el instrumento de desarrollo del sector.
De acuerdo con las previsiones manejadas por el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, en el supuesto de que el informe de Costas esté limpio no recoja condicionantes, será posible llevar la aprobación definitiva del Plan Especial de Reforma Interior (Peri) de La Térmica el próximo mes de abril.
"A este mes de marzo es imposible, porque la Comisión de Ordenación del Territorio ha sido este lunes y no está previsto convocar una extraordinaria", comenta López a EL ESPAÑOL de Málaga. Es por ello por lo que el edil apunta a abril.
El paso por el Pleno permitirá poner fin a la larga y azarosa odisea de un proyecto para el que se pusieron los primeros cimientos en agosto de 2008, cuando se firmó el primer convenio urbanístico que pesa sobre estos terrenos, sobre los que se levantó la antigua central térmica de Endesa en la capital de la Costa del Sol.
Aquel documento sentó las bases para permitir el uso residencial de una parcela que en origen era industrial. Y ello a cambio de que la ciudad recibiera una compensación económica tasada en 58 millones de euros. La llegada de la crisis del ladrillo y la incapacidad de los diferentes promotores a ir adelante con los compromisos hizo que el Consistorio recibiera en pago por esta suma casi la mitad de los aprovechamientos urbanísticos del sector.
La otra mitad fue vendida por Endesa al fondo de inversión Ginkgo, que se mantiene al frente de la iniciativa de la mano de Espacio. Son estos los últimos actores privados que desde hace varios ejercicios buscan allanar el camino administrativo que les permita acometer una de las grandes actuaciones residenciales de la ciudad.
Gran paquete residencial
Los datos recogidos en el planeamiento dan muestra de la envergadura de la misma. El planeamiento vigente permite sobre estos terrenos, de casi 116.000 metros de superficie, un máximo de 870 viviendas, 273 de ellas protegidas. No parece, en cualquier caso, que la intención de los promotores sea alcanzar estos números, en una clara apuesta por incrementar las superficies de los pisos futuros.
A estos parámetros hay que sumar más de 16.826 metros cuadrados de techo para uso hotelero y otros 14.755 metros de techo para oficinas. Hay otros 59.524 metros que se destinarán a zonas verdes, y 6.377 metros serán para equipamiento. Dentro de esta última pastilla, se establece una superficie máxima a construir de 19.366 metros para servicios sociales, administrativos y deportivos.
La intervención también incluye 580 plazas de aparcamiento sobre la vía pública, un mínimo de 2.317 plazas de aparcamiento en las parcelas de titularidad privada y otras 315 bajo las parcelas destinadas a equipamiento, lo que supone un total de 3.212 estacionamientos.
La propuesta de ordenación aprobada recoge como carga externa al sector el trazado y la prolongación del bulevar Pilar Miró y calle Villanueva de Algaidas, de manera que se conecte la barriada de Parque Litoral con esta nueva centralidad y a ésta con la futura prolongación del paseo marítimo de Poniente. A esto se suma la demolición de la actual subestación eléctrica.
Es igualmente relevante la necesidad de respetar la chimenea de la antigua central térmica, catalogada como Bien de Interés Cultural (BIC). Para ello, se genera un importante espacio público con una distancia mínima de 70 metros al edificio más cercano.
El coste aproximado de las obras de urbanización e implantación de los servicios en el sector se estima en 13,8 millones de euros (IVA no incluido). Un presupuesto al que habrá que añadir una serie de cargas complementarias valoradas en 14,8 millones de euros, tales como el traslado de la subestación eléctrica, el refuerzo o reforma de redes eléctricas y la adecuación del espigón de La Térmica, entre otras.