Como era de esperar, la llegada al Centro histórico ha hecho saltar por los aires todos los registros de demanda del Metro de Málaga. La tendencia que ya se pudo entrever tras la inauguración del tramo final del trazado y durante la Semana Santa, con picos extraordinarios de viajeros, queda consolidada con los datos del pasado mes de abril, el primero en el que los malagueños han podido disfrutar la llegada de los trenes hasta la estación Atarazanas, en la Alameda Principal.

Las cifras aportadas por la Consejería de Fomento no dejan lugar a la duda y miden con exactitud el peso que tiene para el ferrocarril urbano la prolongación del recorrido desde El Perchel, hasta donde llegaban las líneas 1 y 2 desde su puesta en funcionamiento a mediados de 2014, hasta el corazón de la urbe.

En total, el suburbano de la capital de la Costa del Sol transportó a casi 1,3 millones de pasajeros (1.298.243), con una media diaria de 43.275. Esto supone, en la comparativa con el mismo mes del año pasado, un crecimiento del 123%. En abril de 2022 fueron 582.173 las personas que usaron los trenes, con una media de apenas 19.406 viajeros.

La confrontación es igualmente positiva si se hace con abril de 2019, periodo precio a la pandemia de la Covid. En esa mensualidad fueron 610.613 pasajeros los que se subieron al Metro, un 112,61% menos que ahora. La media diaria fue de 20.354.

En los primeros cuatro meses del año (enero-abril), la demanda del ferrocarril urbano malagueño alcanza ya los 3.469.370 usuarios, casi 1,4 millones más que en el mismo intervalo del año pasado. Esto significa un incremento del 67,52 %.

Hay que tomar en consideración que abril está claramente marcado por la Semana Santa, un periodo en el que la demanda del Metro se dispara de manera apreciable. Un incremento que ha sido exponencial al coincidir este ejercicio con la prolongación hasta la Alameda, epicentro de las procesiones.

Sirva para medir el peso de este acontecimiento social que desde el Viernes de Dolores y el Domingo de Resurrección fueron 516.990 los pasajeros que usaron el suburbano. Fue casi el triple que en la Semana Santa de 2022 y un 195,8% más que en la de 2019. Las jornadas de mayor afluencia se registraron el Lunes y Jueves Santo, con 75.185 y 80.019 usuarios transportados, respectivamente. 

Sin incluir la Semana Santa, las otras tres semanas de abril han tenido una media superior a los 37.000 usuarios diarios. Una cifra que, de aplicarse a todo el ejercicio, aproximaría el balance final del ejercicio a los 14 millones de usuarios. Y es justamente este el horizonte inicial que se viene manejando desde hace meses por parte de la Junta y la empresa responsable de la explotación comercial, Metro de Málaga.

La aspiración final del Metro es que una vez alcance el entorno del Hospital Civil (no será antes de finales de 2027) sea capaz de mover del orden de los 21 millones de pasajeros anuales.