La robustez del Metro de Málaga como alternativa en materia de movilidad se afianza en la primera mitad del año. Un periodo en que la demanda se ha agigantado tras la llegada de los trenes hasta el Centro Histórico, hasta el punto de cerrar junio con un acumulado de pasajeros de 5.781.555. El dato supone un 82% más que en el mismo periodo de 2022.
Esta mejora considerable en el uso del ferrocarril urbano se debe, en buena medida, a su capacidad para superar la frontera que desde su puesta en servicio, a finales de julio de 2014, le impedía ampliar su recorrido más allá del intercambiador de El Perchel, junto a Vialia.
Romper con esa distancia física y sumar a la red el kilómetro que le separaba de la Alameda Principal ha permitido al suburbano dar un salto exponencial en su explotación comercial. De acuerdo con los datos aportados a EL ESPAÑOL de Málaga por la Agencia de Obra Pública de Andalucía, dependiente de la Junta de Andalucía, el Metro ha sido capaz de mover a algo más de 3,6 millones de pasajeros desde que toca el corazón de la ciudad.
Esta es la suma de usuarios de los meses de abril, mayo y junio, lo que representa una media de 39.675 diarios, un valor que está en las antípodas del periodo previo a la llegada hasta la estación de Atarazanas.
A modo de comparación, sirva decir que los tres primeros meses de este año, el suburbano ha transportado a unos 2,17 millones de personas, lo que supone cerca de 24.000 diarios. De este trimestre, enero sumó 645.328 viajeros (+47,3%); febrero, 649.302 viajeros (+42,1%), y marzo, 876.497 viajeros (+47,6%). ¿Y que sucedía en el segundo trimestre de 2022? En estos tres meses la media era de apenas 19.153 viajeros al día, un 107,1% menos que ahora.
Fue justamente a finales de este último mes, en la antesala de la Semana Santa de Málaga, cuando la Junta puso en marcha el tramo final de la infraestructura entre El Perchel y Atarazanas. Dentro de la estadística, apenas 4 días contabilizan con el recorrido ya en servicio.
A partir de ese momento las cifras se disparan: abril, 1.298.243 (+122,9%), mayo, 1.196.053 (106,8%) y junio, 1.116.132 (111,9%). Desde la Consejería de Fomento, estos parámetros consolidan la idea de que llegar al Centro de Málaga iba a permitir duplicar la demanda. Manteniendo la tendencia actual, no parece descabellado pensar que el Metro pueda llegar a tener unos 7 millones de viajeros en la segunda del año (a razón de 39.000 diarios), lo que le elevaría la demanda de 2023 a unos 13,8 millones.
Pese al buen comportamiento observado, las estadísticas de usuarios confirman una reducción de la demanda diaria. Lejos del impacto inicial del mes de abril, el primero completo con el recorrido hasta Atarazanas (en buena medida debido a la Semana Santa, periodo de especial tirón), el mes de junio ha cerrado con una media de 37.204 pasajeros de media, por debajo de los 38.582 de mayo y los 43.274 de abril.
Desglosando la media diaria por tipo de día, se observa que los días laborables son los de mayor uso y se sitúan en 44.084 personas usuarias/día. A continuación, le siguen los sábados con 34.156 viajeros al día, y los domingos y festivos, con una media de 27.078 pasajeros transportados por jornada.
Hasta la finalización del primer semestre, el día con mayor afluencia de viajeros fue el 6 de abril, con 80.019 personas usuarias (Jueves Santo), mientras que el de menor registro se localizó el 1 de enero, con solo 5.305 viajeros. Ampliando el foco de análisis a todo el periodo de funcionamiento del Metro, son casi 52 millones de viajeros los que se han subido a los trenes.