El gran chino que se levanta a pocos metros del Palacio de los Deportes Martín Carpena y del Hospital Quirón, recordado por muchos por haber acogido años atrás a AKI, tiene los días contados. El interrogante es qué se levantará en su lugar. Porque son varias las alternativas que viene manejando en los últimos meses el grupo inmobiliario que está detrás de la operación, la firma AGP Real Estate 2, S. L., relacionada con Nuovit.
La empresa dispone de un acuerdo con la propiedad para hacerse con el inmueble en caso de prosperar algunos de sus planes de futuro. Con el primero de ellos, que consiste en la construcción de una residencia de estudiantes o de mayores, ha pinchado en hueso.
Y ello porque, salvo sorpresa, la posición inicial expresada desde el Ayuntamiento de Málaga es de rechazo. La negativa no pesa sobre el pretendido equipamiento social, sino sobre la idea de la empresa de elevar considerablemente la altura permitida en el sector.
En concreto, según queda recogido en el acuerdo de la Junta de Gobierno Local del pasado 21 de julio, la Gerencia de Urbanismo "inadmite" el plan que implicaba pasar de PB+1 a PB+6, además del establecimiento de nuevos parámetros urbanísticos como nuevas alineaciones y nueva ocupación.
Las condiciones urbanísticas de la pastilla, localizada en la calle Villanueva del Rosario, 18, sitúa en algo más de 6.200 metros cuadrados la superficie, con una edificabilidad asignada de 7.100 metros cuadrados.
Pero esta oposición municipal a revisar las dimensiones en vertical del desarrollo sobre estos terrenos no cierra la puerta a que avance una solución alternativa. Así lo han comentado fuentes conocedoras de la operación, que apuntan la existencia de un plan b en caso de no prosperar definitivamente la idea original.
Ese plan b pasa por la construcción con un supermercado en la planta baja, al que sumar oficinas en la planta superior. Esta actuación, en caso de ir adelante, no traería consigo un aumento de la altura del futuro inmueble, lo que permitiría superar el escollo municipal. No obstante, según las fuentes, hay ciertas dudas respecto a la alineación que han de ser solventadas.
Muestra del peso de la operación, que está a expensas de que se allane el camino entre Urbanismo y los promotores, es que el acuerdo de compra puede rondar los 10 millones de euros, a los que habría que sumar otros 4 millones para la ejecución material del nuevo proyecto.