Novedades en el proyecto de transformación del Cortijo Jurado en un gran complejo de oficinas

El ambicioso proyecto de transformación del histórico Cortijo Jurado, en Málaga, avanza. La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento ha aprobado este viernes el avance del estudio de ordenación que permitirá a la promotora SUBA impulsa una operación que puede requerir unos 25 millones de euros de inversión. El trámite incluye el documento ambiental estratégico.

El avance, según precisan, va a permitir realizar los actos preparatorios necesarios para la redacción de un estudio de ordenación mediante el que modificar alguna de las determinaciones del sector. Todo ello con el fin de permitir usos empresariales y no exclusivamente hoteleros, dando respuesta a la importante demanda que existe en la ciudad.

El ámbito afectado tiene una superficie de más de 43.500 metros cuadrados, en el que se autoriza un techo edificable de 19.098 metros. De esta extensión sólo será ocupado el 30%, autorizándose una altura máxima de las futuras edificaciones de PB+2. O lo que es lo mismo, de 10,50 metros.

La parcela pasará a tener uso productivo empresarial, manteniendo el hotelero como compatible. Una de las particularidades del proyecto de SUBA es que incluye la rehabilitación del edificio del Cortijo Jurado, sobre el que pesa un grado I protección arquitectónica. 

La propuesta que hay actualmente sobre la mesa varía respecto a la inicialmente planteada por el promotor privado. En este sentido, destaca la eliminación de una edificación de diseño futurista que se había dibujado en el proyecto, debido al impacto que generaba sobre el antiguo cortijo.

En el visto bueno municipal se incide en que cualquier actuación sobre la parcela "respetará la visión de este edificio, como referente singular del paisaje de la zona". Así, se subraya que las cubiertas de las nuevas edificaciones "no podrán sobrepasar la rasante de la plataforma en que se ubica el edificio protegido". 

Otra exigencia por parte de la Gerencia de Urbanismo es que se tiene que evitar adosar la nueva edificación al edificio protegido en todo su perímetro, planteando un patio interior que puede ser atravesado para permitir las conexiones entre edificios y donde estarán ubicados los núcleos de comunicación vertical de acceso a los mismos.

Sobre este ámbito existe un convenio suscrito que contempla incluir en el proyecto un aula de cultura permanente cuyo uso podrá ser requerido, a través de la Junta Municipal de Distrito, por las diferentes asociaciones, colectivos, grupos municipales y la propia Junta de Distrito; así como proyectar los jardines previstos como equipamiento colectivo de la población cercana. Una vez superada la aprobación de la Junta de Gobierno Local, el documento será sometido a información pública durante 30 días.